WASHINGTON,/Europa Press
El exembajador de Estados Unidos ante la Unión Europea Gordon Sondland ha asegurado este miércoles que sí existió un intercambio de favores (‘quid pro quo’) para forzar a Ucrania a impulsar una investigación sobre Hunter Biden, el hijo del exvicepresidente de Estados Unidos Joe Biden, al tiempo que ha señalado que todas las gestiones diplomáticas en este sentido se hicieron siguiendo «órdenes del presidente» de Estados Unidos, Donald Trump.
En la declaración por escrito que ha remitido a la Cámara de Representantes en el marco de la investigación del proceso de destitución parlamentaria (impeachment) contra Trump, Sondland se ha reafirmado en su declaración anterior y ha dicho que hubo un «quid pro quo» porque el Gobierno norteamericano paralizó la ayuda militar a Ucrania a la espera de que el Ejecutivo ucraniano anunciara públicamente que investigaría a Hunter y Joe Biden.
Además, ha asegurado que tanto el Departamento de Estado como el Consejo de Seguridad Nacional y la Casa Blanca eran plenamente conscientes de los «esfuerzos» que se estaban realizando con Ucrania, para obligar a las autoridades de este país a impulsar la investigación sobre los Biden.
En este sentido, Sondland ha dicho que el secretario de Estado, Mike Pompeo, el anterior asesor de Seguridad Nacional John Bolton y altos cargos de la Casa Blanca sabían que el abogado personal de Trump, Rudolph Giuliani, estaba realizando gestiones en ese sentido con las autoridades ucranianas.
«Sabían lo que estábamos haciendo y por qué», ha señalado Sondland, en la declaración remitida a la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes, según informa la cadena de televisión estadounidense CBS. «Todos estaban al tanto. No era secreto», ha indicado.
Sondland ha negado que existiera una «diplomacia paralela» para estas gestiones con Ucrania y ha dicho que él no quería trabajar con el entonces enviado especial para Ucrania, Kurt Volker, y con el actual secretario de Energía estadounidense, Rick Perry, pero que se vio obligado a hacerlo.
«Nosotros seguimos las órdenes del Presidente», ha señalado para justificar el hecho de que él trabajara junto con Volker y Perry en contacto directo con Rudolph Giuliani, que no tiene cargo alguno en el Gobierno y es únicamente al abogado personal de Trump.
Sondland es un testigo clave en la investigación del “impeachment” y su testimonio ha cobrado mayor importancia desde que decidió cambiar su versión para pasar a confirmar que sí que hubo un «quid pro quo» para que Trump consiguiera que Ucrania impulsara una investigación sobre el que podría ser su principal rival político en las presidenciales de 2020, Joe Biden.
Trump ha denunciado en reiteradas ocasiones que el ‘impeachment’ es una caza de brujas y ha subrayado que la investigación debería suspenderse porque no hubo «quid pro quo», una afirmación que rechaza Sondland en sede parlamentaria.