SANTIAGO/AP
El presidente Sebastián Piñera dijo que las demandas sociales que hace 32 días siguieron a un estallido social que ha costado 26 vidas, son justas y legítimas, al tiempo en que aseguró que no habrá impunidad ante hechos violentos, no importa de dónde vengan.
En su primera aparición en cinco días, Piñera se dirigió al país la noche del domingo y señaló que las últimas cuatro semanas “nos han dejado profundas lecciones y han sembrado esperanza”.
“Todos hemos cambiado, porque el pacto social se resquebrajó y mostró sus heridas”, dijo el mandatario, en alusión a las exigencias sociales a lo largo del país por mejoras en pensiones, salarios, salud y educación, más impuestos a los ricos y de una nueva Constitución.
Aseguró que “no habrá impunidad ni con los que hicieron actos de inusitada violencia, ni con aquellos que cometieron atropellos y abusos”.
El uso indiscriminado de escopetas antidisturbios ha dejado miles de heridos, entre ellos a unas 230 personas que perdieron la visión de un ojo tras ser impactados por balines o perdigones.
“En algunos casos no se respetaron los protocolos, hubo uso excesivo de la fuerza, se cometieron abusos o delitos y no se respetaron los derechos de todos», añadió.
Sobre el inédito acuerdo político que alcanzaron todos los partidos políticos, excepto el comunistas que se automarginó, indicó que “estoy seguro tiene el apoyo mayoritario de la ciudadanía, la que tendrá una activa participación”.
Hasta hace una semana Piñera rechazaba la idea de una nueva Constitución y solo favorecía reformas a la vigente, que fue impuesta por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).