MADRID/Europa Press
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha asegurado hoy que es «optimista» en cuanto a la consecución de su objetivo de pacificar el país sin tener que recurrir a la fuerza, después de que desde el domingo se hayan registrado dos matanzas que han dejado casi una treintena de muertos.
«Se va a lograr, estoy optimista», ha sostenido durante su rueda de prensa diaria. Pese a los últimos acontecimientos, ha añadido, «estamos trabajando bien y va a haber buenos resultados».
López Obrador ha defendido que se alcanzará la paz con «un nuevo paradigma». «No vamos a utilizar la fuerza» sino que lo que se hará será atajar las causas en la raíz de la violencia, ha añadido, según informa el diario ‘La Jornada’.
«No vamos a utilizar la fuerza, no vamos a regresar a ese modelo de la letalidad, cuando son siempre más los muertos que los heridos y los detenidos», ha insistido. «Es cuando hay un afán de exterminio, en donde se remata a los heridos», ha añadido, subrayando que aunque «duele decirlo, es la verdad y se practicó en México».
El mandatario ha condenado los últimos sucesos, tras la muerte ayer en el estado de Guerrero de catorce civiles y un militar en un enfrentamiento entre el Ejército y presuntos civiles armados. «Es lamentable la pérdida de seres humanos», ha manifestado.
Por otra parte, ha descartado que el suceso de Guerrero esté relacionado o pueda ser una represalia por el enfrentamiento registrado el domingo en Michoacán en el que murieron catorce policías en una emboscada. «Lo descarto totalmente», ha afirmado.
En este sentido, ha dejado claro que su Gobierno no va a «permitir que se aplique la ley del talión». «Pienso que la paz y la tranquilidad son fruto de la justicia. No se puede enfrentar la violencia con violencia», ha defendido.