PARÍS
Europa Press/DPA
Hoy los chalecos amarillos han salido a la calle por 17º sábado consecutivo para movilizarse de forma «decisiva» contra el Grand Débat o Gran Debate impulsado por el presidente francés, Emmanuel Macron, para introducir reformas políticas y que culmina el próximo 16 de marzo.
El objetivo de los líderes de este movimiento horizontal es recuperar el espíritu del inicio del movimiento, cuando en noviembre sacó a la calle a 282 mil personas con iniciativas como una acampada junto a la Torre Eiffel y toda una serie de actos y foros de debate.
«Acto decisivo: no nos moverán» es el lema de esta acampada en los Campos de Marte, junto a la Torre Eiffel. Ya en la noche del viernes unos 30 manifestantes intentaron levantar estructuras cerca del emblemático monumento, pero la Policía lo impidió.
«Si no se anuncian medidas reales, permaneceremos en este lugar todo el fin de semana y más tiempo si es necesario», asegura la página de Facebook del evento, que cuenta con 1 mil 400 asistentes confirmados y 6 mil interesados.
Esta cita debe «instalar nuestras rotondas en el corazón de la capital, donde seremos visibles y escuchados», ha apuntado una de las voces de los chalecos, Priscillia Ludosky, quien ha invitado además a las organizaciones ecologistas a sumarse a la movilización y protestar contra el «vacío de la política climática».
Ayer, desde el Gobierno, el ministro del Interior, Christophe Castaner, apelaba a los chalecos amarillos desde Marsella para preguntarles «qué huella» quieren dejar, «la de la afirmación o la de la violencia». En ese sentido, recordaba que el Campo de Marte es un lugar público. «Si quieren sentarse en paz, pueden hacerlo, pero lo mejor es que declaren su intención en lugar de hacerlo en las redes sociales. Nada prohíbe las manifestaciones, pero hay reglas bastante simples que simplemente consisten en declararlas», argumentaba.
Además el Acto XVII de los chalecos amarillos reivindica los derechos de las mujeres y desde las 11 las mujeres del movimiento están convocadas en los Campos Elíseos para «converger con todas las movilizaciones».
Otro de los eventos centrales será un «flashmob gigante» en la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de Roissy-Charles de Gaulle para protestar contra el proyecto de privatización de Aéroports de Paris (ADP). También se convocaron a actos en Lyon, Besançon, Estrasburgo, Lille, Burdeos, Montpellier, Avignon, Quimper o Puy-en-Velay.
Tras cuatro meses de movilización continua, el movimiento da algunas señales de agotamiento con un lento declive en la participación en los últimos sábados. El 2 de marzo había 39 mil 300 manifestantes en toda Francia según el Ministerio del Interior, de ellos 4 mil en París, pero para el 16 de marzo los «chalecos amarillos» pretenden reunir «a toda Francia en París» para lanzar un «ultimátum» al Gobierno.