POR NATALIYA VASILYEVA
MOSCÚ/AP
El Kremlin advirtió que la ley marcial que entrará en vigor en parte de Ucrania mañana podría provocar nuevas hostilidades en el este, controlado por separatistas prorrusos.
El parlamento ucraniano aprobó ayer una propuesta de su presidente, Petró Poroshenko, para imponer la ley marcial durante 30 días, algo que Kiev había evitado cuando Rusia se anexionó la península de Crimea o envió armas y soldados de forma clandestina al este durante la devastadora guerra.
La votación se produjo tras un enfrentamiento cerca de Crimea el domingo, cuando guardias armados rusos asaltaron y abrieron fuego contra tres navíos de la Armada que navegaban por el Mar Negro hacia un puerto ucraniano. Los rusos capturaron las embarcaciones y a sus tripulaciones, que se espera que comparezcan ante un juez hoy.
Rusia y Ucrania se culparon mutuamente por la confrontación, que elevó la posibilidad de un enfrentamiento total entre las dos naciones vecinas. Según Kiev, sus buques se dirigían al Mar de Azov en línea con las leyes marítimas internacionales, mientras que Moscú sostiene que no habían obtenido permiso para cruzar el Estrecho de Kerch, cubierto por un puente que Rusia completó este año.
La ley marcial que se aplicará en 10 regiones ucranianas “tiene el potencial” de desencadenar hostilidades en el este del país, explicó Dmitry Peskov, vocero del presidente de Rusia, Vladimir Putin.
En el este de Ucrania, el corazón industrial del país, separatistas respaldados por Moscú combaten contra el Ejército desde 2014, pero las hostilidades se calmaron en gran medida gracias a la tregua firmada en 2015.
En una conversación telefónica con la canciller de Alemania, Angela Merkel, en la madrugada de hoy, Putin mostró su “seria preocupación” por las posibles implicaciones de la ley marcial.
Por otra parte, el ministro alemán de Exteriores, Heiko Maas, manifestó hoy que Berlín ha «pedido a Rusia y Ucrania que muestren la mayor moderación posible” y sugirió que Alemania, Francia, Rusia y Ucrania podrían trabajar juntas para aliviar las tensiones.
Preguntado sobre las ofertas de mediación previas, Peskov dijo que Moscú no las necesita porque considera el enfrentamiento en el Mar Negro como un simple caso de violación de su frontera.