Por ZEKE MILLER
WASHINGTON
Agencia (AP)
El vicepresidente de Estados Unidos acusa a China de intentar debilitar a Donald Trump mientras la Casa Blanca despliega una nueva retórica más agresiva sobre la política comercial, económica y exterior de Beijing.
En declaraciones preparadas para una aparición en el Hudson Institute hoy, Pence dice que China está usando su poder de «formas más proactivas y coercitivas para interferir en las políticas y en la política nacional de Estados Unidos”.
El discurso de Pence se produce una semana después de que Trump acusase a China durante una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de interferir en las elecciones estadounidenses para ayudar a sus rivales demócratas.
«Lamentablemente, hemos descubierto que China está tratando de interferir en las venideras elecciones legislativas», dijo Trump. «No quieren que yo gane, no quieren que nosotros ganemos porque yo soy el primer Presidente que desafió a China en el tema comercial». Como prueba, el presidente se refirió más tarde a un comercial publicado en el diario The Des Moines Register por entidades afiliadas al gobierno chino.
Gran parte de la intervención de Pence busca informar a la población de lo que el Ejecutivo considera una campaña, tanto encubierta como directa, de China para ganar influencia.
Según el texto, Pence citará una evaluación de la comunidad de inteligencia estadounidenses que dice que «China está apuntando a Estados Unidos, a gobiernos y funcionarios estatales y locales para explotar cualquier división entre los niveles federal y local de la política. Está empleando cuestiones importantes, como los aranceles, para profundizar en la influencia política de Beijing».