Buenos Aires/dpa
El financista Ernesto Clarens entregó a la Justicia argentina un archivo con los nombres de al menos 86 empresas que habrían pagado sobornos a los gobiernos del ya fallecido Néstor Kirchner (2003-2007) y de Cristina Fernández (2007-2015), informaron hoy medios locales.
Clarens, considerado el financista que manejaba los fondos de los Kirchner, confesó ante la Justicia que recaudó sobornos pagados por empresas durante el kirchnerismo.
De acuerdo con el detalle revelado por el canal América, aportó una lista de 86 empresas que pagaron sobornos y explicó que él tenía el trabajo de recaudar o cambiar a dólares los pesos que le entregaban.
Varias de esas empresas están involucradas en la investigación de los denominados «cuadernos de la corrupción», en los que el chofer del ex «número dos» del ya desaparecido Ministerio de Planificación Federal Roberto Baratta anotó entre 2005 y 2015 los detalles de los sobornos que iba a cobrar a distintas oficinas y empresas y a quiénes eran entregados, en algunos casos en la residencia presidencial oficial o el departamento privado de la familia Kirchner.
Según señaló el financista, en la lista está el detalle de sobornos pagados en 2010 por empresarios de la Cámara de la Construcción y de la Cámara Argentina de Concesionarios Viales, indicaron fuentes judiciales citadas hoy por el diario «Clarín». Clarens entregaba ese dinero al entonces secretario de Kirchner, Daniel Muñoz, quien falleció años atrás.
Varios ex funcionarios kirchneristas y empresarios se encuentran detenidos en el marco de esta causa, en la que el juez federal Claudio Bonadio investiga si los Kirchner lideraron una asociación ilícita. Otros, en tanto, recuperaron su libertad tras firmar acuerdos con la Justicia para declarar como arrepentidos.