Por LAURIE KELLMAN y HANNAH FINGERHUT
WASHINGTON
Agencia (AP)
Los jóvenes en Estados Unidos buscan algo nuevo en este año electoral: un cambio generacional.
Una encuesta realizada por The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research y MTV descubrió que la mayoría de los estadounidenses de entre 15 y 34 años piensan que votar en las elecciones intermedias de noviembre le da a su generación algo de opinión sobre cómo se maneja el gobierno, y el 79% de este grupo dice que los líderes de su generación podrían hacer un mejor trabajo dirigiendo el país.
La encuesta encontró a jóvenes ansiosos de votar por alguien que comparta sus puntos de vista sobre temas como la atención médica y la política de inmigración. Expresaron mucho menos entusiasmo por votar por un candidato descrito como un político de por vida.
«Las personas mayores en el Congreso no entienden internet y no saben de lo que están hablando», dijo Greg Davis, de 29 años y oriundo de Grandview, Ohio. Recordó cuando los legisladores cuestionaron al fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, quien manejó fácilmente lo que se suponía que era un duro interrogatorio en el Senado sobre la política de privacidad de su empresa. «Las preguntas que le hicieron sobre la seguridad y la privacidad eran asquerosas. Necesitamos un liderazgo que realmente entienda la tecnología».
Es cierto que el Congreso actual es uno de los más longevos en la historia del país. Al comienzo del 115vo Congreso en enero de 2017, la edad promedio de los miembros de la Cámara de Representantes era de casi 58 años. La edad promedio de los senadores era de casi 62, entre las de más edad, según el Servicio de Investigación del Congreso.
El cambio político está en el aire en 2018. Hay un número récord de mujeres candidatas. Los jóvenes estadounidenses –que no recuerdan una era sin internet– podrán votar. Algunos comenzaron a prestar atención en 2016, después de que Donald Trump derrotó a la demócrata Hillary Clinton.
Casi dos tercios de los jóvenes en la encuesta dicen que están extremadamente o muy entusiasmados de votar por un candidato que se preocupe por los problemas que los afectan a ellos y a su generación, incluida la economía, la política de armas e igualdad de derechos, inmigración y salud.
Eso podría importar en las elecciones de este año si los jóvenes salen a votar, un resultado al que están invirtiendo mucho las campañas y los comités de acción política.