Por Hans Dahne /dpa
Washington
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a generar confusión hoy con sus declaraciones sobre Rusia, después de que la víspera se retractara tras las críticas recibidas tras su cumbre con su par ruso, Vladimir Putin, el lunes en Helsinki.
Ante la pregunta de una periodista de si Rusia sigue teniendo a Estados Unidos en la mira, Trump respondió: «Gracias, no». Cuando se le repreguntó si no creía que es ese el caso, volvió a decir: «No».
De esta forma, apenas dos días después de su cumbre con Putin, Trump puso en duda una vez más las investigaciones de sus servicios secretos, que establecieron que hubo injerencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos, en las que Trump resultó ganador.
Más tarde, sin embargo, la portavoz del presidente, Sarah Sanders, dijo en Washington que Trump sigue considerando que Rusia tiene a Estados Unidos en la mira. «Él cree que seguramente volverán a tener en la mira las elecciones estadounidenses», afirmó. Y añadió: «Estamos tomando medidas para que las cosas no se repitan».
De acuerdo con Sanders, con sus dos «no» de hoy Trump quiso dar a entender que no quería responder más preguntas. «Hablé con el presidente y no respondió a la pregunta».
Sin embargo, Trump habló todavía un minuto con los periodistas tras su doble «no». El desmentido de Sanders se produjo unas tres horas después de los primeros informes.
Además, Sanders dijo que Trump le advirtió a Putin el lunes que se mantenga alejado de las elecciones estadounidenses.
El martes, Trump salió a decir que Rusia interfirió en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 después de recibir fuertes críticas tras su cumbre con Putin.
Durante la rueda de prensa en Helsinki, Putin negó cualquier intervención de Rusia en los comicios. El mandatario estadounidense afirmó entonces: «No veo motivos por los cuales habría de ser Rusia».
Este martes, Trump aclaró que, tras revisar una transcripción de sus declaraciones, notó que se había equivocado. «La frase debía decir: No veo motivos por los cuales no habría de ser Rusia».
«Acepto las conclusiones de nuestros servicios secretos de que hubo injerencia de Rusia en las elecciones de 2016», dijo ayer Trump en la Casa Blanca. El mandatario estadounidense afirmó que se había expresado mal en la conferencia de prensa con Putin y que había querido decir exactamente lo contrario.
Previamente, Trump había usado este miércoles Twitter para atacar a sus detractores afirmando que muchos preferirían ir a la guerra antes de verlo llevarse bien con Putin.
