Por agencia/dpa
Tel Aviv
El Parlamento de Israel aprobó ayer a última hora una ley que en el futuro permitirá al ministro de Educación impedir el acceso a un centro de formación de las organizaciones no gubernamentales críticas con el Ejército israelí.
La ley se denomina Breaking the Silence (Rompiendo el silencio), porque se dirige contra la organización homónima que aboga por el fin de la ocupación israelí en Cisjordania. La ONG, integrada sobre todo por soldados y reservistas, publica testimonios anónimos de uniformados en los territorios ocupados en los que queda expuesto el mal comportamiento sistemático del Ejército.
«Breaking the Silence cruzó hace tiempo los límites del discurso legítimo cuando decidió avergonzar a Israel en el panorama internacional», dijo el ministro de Educación ultraderechista Naftali Bennett, según informa el «Times of Israel».
«Se trata de la mayor restricción a la libertad de expresión con motivos políticos que jamás se ha visto en una ley israelí», dijo el cofundador de la organización Yehuda Shaul. Tan sólo busca «continuar con el proyecto de la ocupación (de los territorios palestinos) y los asentamientos».
Israel conquistó Cisjordania, entre otros, en la Guerra de los Seis Días en 1967. Los palestinos exigen la devolución de ese territorio y formar así su propio Estado.
La organización da conferencias en escuelas israelíes y en todo el mundo condenando la ocupación en Cisjordania y las actuaciones en la Franja de Gaza.
En tanto, la Unión Europea (UE) rechazó hoy categóricamente las acusaciones israelíes de que apoya con millones de euros el odio contra Israel y el terrorismo
El ministro israelí para Asuntos Estratégicos, Gilad Erdan, publicó la misiva al respecto de la responsable de política exterior de la UE, Federica Mogherini, en la que describe las acusaciones de «infundadas e inaceptables».