POR DESMOND BUTLER Y CHAD DAY/AP
Washington

La Casa Blanca anunció que altos funcionarios del FBI y el Departamento de Justicia han acordado reunirse con líderes del Congreso para “analizar” información altamente confidencial solicitada por los legisladores sobre el manejo de la investigación de la injerencia rusa en las elecciones.

Se llegó a ese acuerdo después que el presidente Donald Trump formuló su insólito reclamo de que el Departamento de Justicia investigue si el FBI se infiltró en su campaña presidencial. No está claro qué podrán analizar los legisladores o si el Departamento de Justicia entregará documentos al Congreso.

Según la secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders, el jefe del despacho presidencial John Kelly será el moderador de la reunión en la que participarán los jefes del legislativo, el FBI, Justicia y la oficina del Director de Inteligencia Nacional. Los funcionarios “analizarán información altamente confidencial y de otro tipo que han solicitado”, dijo, sin entrar en detalles.

Durante una reunión con Trump ayer, el subsecretario de Justicia Rod Rosenstein y el director del FBI Christopher Wray reiteraron un anuncio del domingo por la noche, de que el inspector general del Departamento de Justicia ampliará una investigación en curso de la injerencia rusa para determinar si hubo vigilancia indebida con motivaciones políticas.

El representante Devin Nunes, un fervoroso partidario de Trump que preside la Comisión de Inteligencia de la Cámara Baja, ha exigido información acerca de una fuente del FBI en la investigación rusa. Y Trump se ha puesto al frente de la causa en la lucha de la Casa Blanca contra la amenaza que plantea la investigación del fiscal especial Robert Mueller para descubrir si hubo vínculos entre Rusia y la campaña de Trump.

Hoy, un grupo de legisladores conservadores planeaba pedir la designación de un segundo fiscal especial para investigar si hubo faltas cometidas por el FBI y Justicia.

Trump tuiteó el domingo, “¡Por este medio exijo, y lo haré oficialmente mañana, que el Departamento de Justicia investigue si el FBI/DOJ infiltraron o vigilaron al Equipo de Campaña de Trump con Propósitos Políticos – y si tal acción fue exigida o solicitada por personas al interior del gobierno de Obama!”

Con esto Trump empezó a aplicar presión presidencial sobre el Departamento de Justicia en relación con la investigación de su propia campaña, una medida casi sin precedentes.

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