Por agencias/dpa
Ciudad de México
La impunidad se acentuó en México en los últimos dos años, lo cual retroalimenta la violencia, la inseguridad y la corrupción, dice un informe publicado hoy por el Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia.
«En México la impunidad es un fenómeno generalizado», dijo Juan Antonio Le Clercq, director del centro de investigación de la Universidad de las Américas Puebla. «Desgraciadamente se ha normalizado políticamente y socialmente en nuestro país», añadió.
El informe IGI-Mex 2018 evaluó la impunidad a partir de 18 indicadores en los 32 estados del país. El resultado fue un aumento promedio de 67,42 a 69,85 puntos con respecto al mismo estudio realizado hace dos años.
Un punto que marca la gravedad de la situación es el bajo número de personas detenidas por homicidio, un delito que en 2017 dejó un récord de más de 29.000 muertos.
«El homicidio no se castiga en México», concluye la investigación. El porcentaje de encarcelados sobre el total de casos de homicidio investigados bajó de 27,5 a 17,09 por ciento desde el anterior informe, publicado en 2016.
«La disminución de casi diez puntos porcentuales de este indicador es resultado de los problemas estructurales de las instituciones de seguridad y Justicia a nivel estatal. Las entidades no tienen agencias de investigación profesionales, independientes y con capacidades suficientes para atender el delito de homicidio», señala.
El informe analiza la evolución tanto desde el punto de vista estructural como desde su funcionamiento, midiendo factores como el número de jueces por cada 100.000 habitantes, de causas penales en primera instancia, personal penitenciario o reclusos sin sentencia.