POR AGENCIAS/DPA
Barcelona
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, se trasladó hoy a Cataluña para participar en un mitin de campaña a las decisivas elecciones del 21 de diciembre en la región y pedir el voto para su Partido Popular (PP).
«El voto al PP es, como siempre, un voto seguro. No sujeto a ningún cambalache», señaló el mandatario conservador en un acto en la ciudad de Lérida, acusando así indirectamente a otras fuerzas como los socialistas del PSC de querer pactar con independentistas.
Rajoy pidió «recuperar la convivencia» y apostar por la democracia, la recuperación económica y el europeísmo frente al secesionismo, valores todos que consideró representados por su PP y el candidato Xavier García Albiol.
Postuló así la necesidad de abrir «una nueva etapa» que ponga fin a «las ensoñaciones y las quimeras de algunos dirigentes políticos», en alusión al proceso independentista impulsado por el ya destituido «Govern» de Carles Puigdemont.
«Nosotros frenamos el disparate. El delirio de la independencia se ha frenado en seco», dijo sobre la intervención de la autonomía de Cataluña por parte de su Gobierno el 27 de octubre.
«La deriva contra la ley de los gobernantes, su intento de romper todo y la declaración de independencia han sido paradas en seco con la Ley en la mano, que es cómo se hace en los países democráticos», insistió.
Rajoy volvió a hacer un balance positivo sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución para intervenir la autonomía catalana el mismo día en que el «Parlament» en Barcelona aprobó crear una nueva república.
«Se ha serenado la vida política, pese a los intentos de algunos por seguir enredando», consideró. «Las cosas están funcionando con normalidad».
El acto de hoy fue el primero de los tres de campaña en los que Rajoy tiene previsto participar hasta las elecciones del 21 de diciembre. Su PP figura muy por detrás en las encuestas con una intención de voto inferior al seis por ciento, dos puntos menos que en las anteriores elecciones autonómicas de 2015.
