Por MATTHEW DALY,
WASHINGTON
Agencia AP
Es tan grande la devastación provocada en Puerto Rico por el huracán María que si el gobierno y el Congreso estadounidenses no le dan más ayuda no podrá recuperarse, dijo ayer la jefa de una junta federal que supervisa las finanzas isleñas.
Natalie Jaresko, directora ejecutiva de la Junta de Supervisión y Administración Financiera para Puerto Rico, expresó al Congreso que el territorio estadounidense requiere fondos de emergencia “en una escala sin precedentes” para restaurar viviendas, agua corriente y energía eléctrica.
Aunque las condiciones han mejorado desde la tormenta del 20 de septiembre, casi el 60% de la isla carece de electricidad, miles de personas están alojadas en refugios y decenas de miles de viviendas no tienen techo, dijo Jaresko. La instalación de techos temporales de lona tomará meses, añadió.
“Sin niveles de ayuda sin precedentes del gobierno de Estados Unidos, la recuperación que planeamos fracasará”, indicó Jaresko. La junta federal estima que necesitará hasta 21 mil millones de dólares durante los próximos dos años para “garantizar la provisión de las funciones básicas de gobierno”, incluidos policías, bomberos, maestros y otros empleados públicos, dijo Jaresko.
Las autoridades puertorriqueñas estiman que la isla sufrió daños por valor de 45 mil a 95 mil millones de dólares, ya que la tormenta prácticamente destruyó la red eléctrica y otra infraestructura. Hasta ahora el Congreso ha aprobado casi 5 mil millones de dólares en ayuda.








