POR AGENCIAS/DPA
Managua, Nicaragua
Los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y de Honduras, Luis Orlando Hernández, se reunieron para discutir temas de seguridad y migración, y una propuesta para crear un fondo de atención de desastres en Centroamérica y el Caribe, se informó oficialmente hoy en Managua.
El portal oficial «El 19» reveló que la reunión entre Ortega y Hernández se realizó la noche (local) del jueves en la capital nicaragüense y con exclusiva cobertura de la prensa oficial.
Ortega expresó que conversaron sobre la eventual obtención de recursos para afrontar las emergencias y catástrofes naturales, como los recientes huracanes «Irma» y «María», que azotaron a las islas del Caribe, y la tormenta «Nate» que afectó a Centroamérica.
Estamos en «la parte más angosta, más estrecha del continente, somos los más vulnerables», dijo el mandatario. Añadió que presentarán la idea del fondo financiero a los países del Caribe y confió en que puedan obtener fondos del Acuerdo de París sobre el clima, que Nicaragua adhirió recientemente.
«Creemos que es oportuno que en el contexto del CARICOM o de los países de la comunidad del Caribe materialicemos ya lo que podría ser el fondo común que esté listo para activarse en el momento en que un país lo necesite», afirmó por su parte el presidente Hernández.
Recordaron que los ciclones y lluvias dejaron este año decenas de muertos y miles de personas damnificadas en Honduras, Nicaragua, Costa Rica y El Salvador, mientras numerosas islas del Caribe fueron arrasadas por dos huracanes devastadores.
«Creemos que es el momento de dar ese paso y Honduras está lista para dar su aporte inicial y comenzar con ese fondo que pueda ser de beneficio para todos», agregó Hernández.
Los gobernantes también abordaron el tema de la seguridad de la región, el combate al narcotráfico y el crimen organizado, y el problema migratorio, a raíz de la eventual suspensión del permiso temporal conocido como TPS para centromericanos en Estados Unidos.
El presidente hondureño dijo al respecto que si Estados Unidos decide no renovar el TPS, deberá regularizar la situación migratoria de esos miles de hondureños, salvadoreños y nicaragüenses que aportan a la economía de aquel país.








