POR AGENCIAS/DPA
Bogotá, Colombia
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, confirmó hoy que la ex fiscal de Venezuela Luisa Ortega, quien llegó el viernes a Bogotá en un vuelo privado, está «bajo la protección» de su Gobierno.
«La (destituida) fiscal Luisa Ortega se encuentra bajo protección del Gobierno colombiano. Si pide asilo, se lo otorgaremos», escribió Santos en Twitter después del silencio que el Ejecutivo mantuvo desde la llegada de la ex funcionaria.
El mandatario terminó así con el suspenso que había en el país sobre el paradero de Ortega, quien arribó a la capital colombiana en un vuelo privado desde Aruba con su esposo, el diputado Germán Ferrer, y dos de sus colaboradores.
Por su parte, el presidente del Senado de Colombia, Efraín Cepeda, invitó a Ortega a través de la misma red social a la plenaria del parlamento que se llevará a cabo mañana martes.
«Invito oficialmente a la (ex) fiscal venezolana Luisa Ortega a acompañarnos mañana en la plenaria del Senado. Bienvenida fiscal», escribió Cepeda.
El ex presidente colombiano Andrés Pastrana (1998-2002) dijo en la víspera que «lo más seguro» es que Ortega «termine pidiendo asilo político en Estados Unidos», en donde, según él, revelará pruebas de los supuestos vínculos del mandatario Nicolás Maduro con casos de corrupción.
Ortega entró en conflicto con el Gobierno venezolano tras oponerse a las medidas del Tribunal Supremo de Justicia y a la creación de una Asamblea Nacional Constituyente, y recientemente acusó a Maduro de haber recibido sobornos de la multinacional brasileña Odebrecht.
La semana pasada, autoridades venezolanas allanaron la vivienda de la ex fiscal, quien fue destituida a comienzos de este mes por la Asamblea Constituyente. De allí se llevaron computadoras y documentos.
Horas antes, su sucesor, Tarek William Saab, pidió la detención de Ferrer, diputado disidente del chavismo, por liderar una presunta red de extorsión que funcionaba desde el Ministerio Público.
Las críticas de Colombia hacia Venezuela han aumentado en los últimos meses en medio de la crisis social, política y económica que vive ese país, donde unas 120 personas han muerto en medio de manifestaciones contra el oficialismo.
Santos afirmó recientemente que su Gobierno no puede reconocer la Asamblea Constituyente que se instaló hace dos semanas en Venezuela porque «no es una institución válida» y fue elegida en el marco de la «destrucción de la democracia» en ese país.
