Washington
DPA
Las élites políticas en Washington criticaron en las últimas horas las amenazas de Trump, quien ayer advirtió a Corea del Norte que sus provocaciones serían enfrentadas «con fuego, ira y poder como el mundo nunca ha visto».
El senador estadounidense republicano John McCain reaccionó con irritación a las declaraciones de Trump. Es poco probable que el Presidente sea capaz de convertir sus palabras en actos, dijo.
«Los grandes líderes que yo conozco no profieren amenazas mientras están dispuestos a negociar. No estoy seguro de que el presidente Trump esté dispuesto a negociar», destacó McCain a la emisora de radio estadounidense KTAR. Asimismo, advirtió de que no se debían tomar demasiado en serio los comentarios del Presidente: «Esto es típico de Trump. Tiende a exagerar».
Entre las filas de los demócratas hubo más críticas hacia la forma de comunicación de Trump.
«Con Corea del Norte debemos actuar de forma firme y prudente», dijo el senador Chuck Schumer en un comunicado. «La retórica irreflexiva no es una buena estrategia para garantizar la seguridad de Estados Unidos».
La senadora Dianne Feinstein también opinó de forma similar, según CNN. «El presidente Trump no contribuye a la distensión de la situación con sus comentarios bombásticos», señaló la senadora.
También citado por CNN, el demócrata Eliot Engel, miembro del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, apuntó que Trump está perdiendo la credibilidad de Estados Unidos con su «reacción inadecuada».
«No nos engañemos: Corea del Norte es una amenaza real. Pero la inestable reacción del presidente sugiere que podría considerar utilizar armas nucleares estadounidenses como respuesta a un comentario molesto del déspota norcoreano», advirtió.
El demócrata de mayor rango del Comité de Asuntos Exteriores del Senado, Ben Cardin, comparó las palabras de Trump con la retórica de Pyongyang: «No deberíamos emplear el mismo tipo de fanfarronadas y comentarios provocativos sobre una guerra nuclear en Corea del Norte».