Madrid/Barcelona
DPA
El Gobierno de Cataluña elevó hoy su desafío al anunciar un referéndum independentista en la región española para el 1 de octubre, a lo que Madrid reaccionó de forma contundente: «No se celebrará porque es ilegal».
El jefe del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, hizo a primera hora del día una declaración institucional para fijar la fecha de la consulta, que prevé preguntar a los catalanes si quieren que Cataluña sea «un Estado independiente en forma de república».
Al no haber convocatoria oficial, el Gobierno español no tomará por ahora ninguna medida, pero advirtió a Puigdemont de que cualquier «actuación que pase de anuncios será recurrida». «Los pensamientos son libres, no delinquen. Si eso se traduce en actos se estudiará», señaló su portavoz, Íñigo Méndez de Vigo.
El jefe del Ejecutivo catalán justificó la decisión de iniciar una vía unilateral para consultar sobre la secesión de la región, una de las más ricas y pobladas de España, ante la falta de respuestas de Rajoy a sus peticiones de negociar una votación pactada.
En ese sentido, apuntó a una «larga y decepcionante colección de ‘noes'» por parte de Madrid a «las propuestas dirigidas para resolver de manera acordada y dialogada el conflicto político».
«Estamos llegando al final de la legislatura y no hemos tenido ninguna respuesta positiva (…) Les toca a las catalanas y a los catalanes decidir su futuro», señaló desde la sede del Gobierno regional, el Palau de la Generalitat de Barcelona.
A su vez, el Ejecutivo español reiteró a Cataluña su oferta de «diálogo dentro de la ley» e instó de nuevo a Puigdemont a acudir a debatir sobre el asunto al Parlamento español.
«El Gobierno afirma que en España un referéndum inconstitucional no se va a celebrar, pero al mismo tiempo tiene una mano tendida hacia los dirigentes secesionistas», dijo Méndez de Vigo en Madrid.
El choque de trenes, si ambas partes siguen afianzadas en sus posiciones, parece inevitable. Rajoy considera que la celebración de un referéndum en Cataluña es «ilegal» ya que va contra la Constitución española, la unidad del país y la soberanía nacional.
En esa línea, hasta ahora ha impugnado ante la Justicia todos los pasos dados por las instituciones catalanas hacia la secesión. Y todo apunta a que volverá a hacerlo si el referéndum se convoca.
El pulso independentista catalán ha ido escalando desde que en 2010 el Constitucional español decidió anular algunos puntos del nuevo Estatuto de Autonomía catalán, una suerte de Constitución regional.
Con el anuncio de hoy, el mandatario catalán respondió al reclamo de las entidades civiles independentistas catalanas y de la CUP, un partido antisistema que con su apoyo permite gobernar a la coalición secesionista Junts pel Sí en la región.
El domingo, los independentistas tratarán de hacer una demostración de fuerza en un acto público convocado en Barcelona -la capital de la región- en la que el técnico catalán Pep Guardiola, actual entrenador del Manchester City, leerá un manifiesto.