Seúl
DPA
Los sondeos a boca de urna auguran una clara victoria del candidato de centro-izquierda y antiguo abogado defensor de los derechos humanos Moon Jae-in en las elecciones presidenciales anticipadas celebradas hoy en Corea del Sur.
Según las encuestas de las emisoras KBS, MBC y SBS, citadas por el periódico «The Korea Herald» y la agencia de noticias Yonhap, Moon consiguió el 41,4 por ciento de los votos, frente al 23,3 por ciento del ex fiscal conservador Hong Jun-pyon y un 21,8 por ciento del centrista Ahn Cheol-soo.
La participación fue alta y alcanzó el 77,2 por ciento del electorado, según la Comisión Electoral Nacional.
Los surcoreanos fueron llamados a las urnas para elegir al sucesor de la ex presidenta Park Geun-hye, quien fue destituida en marzo por un escándalo de corrupción.
Las encuestas previas a la elección ya habían vaticinado una victoria de Moon, que perdió las elecciones de 2012 ante Park. El político, de 64 años, votó en una escuela de Seúl, junto con su mujer.
Una encuesta realizada poco antes de la elección señaló que la corrupción y las reformas son los temas más importantes para los votantes de la cuarta economía asiática.
El país, famoso por sus exportaciones tecnológicas, se enfrenta a un creciente desempleo juvenil, altas tasas de deuda privada y un extendido miedo a quedarse sin recursos entre los adultos mayores.
El ganador de las elecciones, que será investido el miércoles, también deberá hacer frente a las crecientes tensiones con la vecina Corea del Norte después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazara con tomar represalias unilaterales contra Pyongyang por sus recientes pruebas nucleares y balísticas.
Moon aboga por desarrollar relaciones más estrechas con el Gobierno comunista de Corea del Norte, pero también ha destacado la importancia de la tradicional alianza con Estados Unidos.
