Damasco
DPA
La Fuerza Aérea de Israel atacó hoy con varios misiles posiciones del Ejército sirio cerca del aeropuerto internacional de Damasco, aseguraron fuentes militares sirias citadas por la agencia estatal de noticias Sana.
Los misiles fueron lanzados desde los Altos del Golán. Esta «agresión» que causó daños materiales no es más que un intento por levantar la moral de las organizaciones terroristas, añadieron las fuentes.
Testigos del hecho informaron de varias fuertes explosiones que dejaron enormes columnas de humo negro sobre el lugar, informó la red de activistas del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. También en Internet circulaban imágenes de lo sucedido.
Una emisora de la milicia chiita libanesa Hizbolá informó que fueron atacados tanques de petróleo y un almacén del grupo pero que no hubo muertos.
Las autoridades de Israel no quisieron comentar la situación pero el ministro de Inteligencia israelí, Israel Katz, aseguró a la Radio del Ejército de su país: «Puedo confirmar que el incidente en Siria se enmarca en la línea de la política de Israel para prevenir la transferencia de armas a Hizbolá».
Su asesor, Arye Shalicar, añadió que Israel no permitirá que el grupo obtenga armas como misiles a través de Siria.
Hizbolá es un importante aliado del presidente Bashar al Assad en la guerra siria y tiene numerosos combatientes en el país árabe. La milicia, que es financiada desde Irán, considera a Israel su principal enemigo. Teherán también es un importante aliado de Al Assad en Siria.
Israel, a su vez, considera a Irán un enemigo y a Hizbolá como una amenaza. El grupo chiita se enfrentó durante años a Israel durante la ocupación israelí del Líbano y ambos volvieron a luchar en una guerra en 2006, varios años después de que las fuerzas israelíes se retiraran de su vecino del norte.
La semana pasada dos proyectiles de mortero impactaron en territorio controlado por Israel al parecer procedentes de Siria y el Estado judío respondió al fuego.
Por otra parte, el Gobierno sirio rechazó hoy en duros términos la afirmación de Francia de que no hay dudas sobre su responsabilidad en el presunto ataque con gas tóxico contra la ciudad de Jan Sheijun a principios de abril, en el que murieron más de 80 civiles.
Se trata de «una campaña de engaños y de difamación» contra Siria, con «acusaciones fabricadas», aseguró el Ministerio del Exterior en Damasco, citado por la agencia estatal Sana. Las acusaciones demuestran que Francia está involucrada «en el crimen», añade.
Mientras tanto, el Observatorio informó hoy también de ataques aéreos en el noroeste de Siria que mataron a 16 civiles, entre ellos siete niños. Las bombas alcanzaron entre otros una clínica en la localidad de Al Der al Sharki, en la provincia de Idlib. Los activistas responsabilizaron del ataque a aviones rusos. En las últimas semanas ha habido varios bombardeos de hospitales en zonas rebeldes, hecho que ha sido condenado a nivel internacional.
Fuerzas gubernamentales sirias anunciaron entretanto haber tomado el control del campo de gas de Al Shair en el centro del país, que estaba en manos de la milicia terrorista Estado Islámico (EI). Se trata de un campo cercano a la ciudad histórica de Palmira. Los campos y gasoductos de la región son de importancia vital para el suministro energético del país.