Seúl
DPA
El heredero del imperio Samsung, que se encuentra detenido desde el 17 de febrero, será acusado formalmente en Corea del Sur de corrupción y otros cargos, informó hoy un grupo especial de investigación al término de sus pesquisas.
El vicepresidente de Samsung Electronics, Lee Jae-yong, y otros cuatro altos directivos de la mayor empresa surcoreana serán acusados en el marco del escándalo en torno a una confidente de la presidenta del país, Park Geun-hye, destituida temporalmente de su cargo debido a la investigación.
Samsung pagó al parecer sobornos a organizaciones de esta confidente, Choi Soon-sil, a cambio de obtener el apoyo del Gobierno a la fusión de dos de sus filiales.
Aunque oficialmente el presidente de Samsung es el padre de Lee, Lee Kung-hee, debido a problemas de salud de este es su hijo quien estuvo al frente de la empresa en los últimos años.
Lee, de 48 años, fue acusado de soborno, malversación, perjurio y por ocultar ganancias procedentes de ilícitos
A Samsung se la acusa de haber donado unos 43 mil millones de won (36.3 millones de dólares/35.2 millones de euros) con el consentimiento de Lee a diversas fundaciones sin fines de lucro operadas por Choi Soon-sil.
Lee ha sido interrogado varias veces desde su detención y rechaza los cargos. La acusación no es solamente un golpe muy fuerte contra Samsung, considerada la marca más valiosa del país, sino que podría afectar todavía más a la mandataria, que está sometida a un proceso de destitución.
Park es sospechosa de haber presionado de forma directa o indirecta al Servicio Nacional de Pensiones para que se autorizase la fusión de dos filiales de Samsung participadas por el fondo de pensiones.
La presidenta, que fue destituida por la Asamblea Nacional en diciembre, está a la espera de la decisión de la Corte Constitucional que determinará si continúa o no en el cargo.
En cuanto a Choi, conocida ya como la «Rasputina coreana», se encuentra en prisión provisional, acusada de haberse enriquecido mediante donaciones de empresas obtenidas gracias a su cercana relación con la presidenta.
El grupo Samsung está considerado como principal patrocinador de dos fundaciones controladas por Choi, Mir y K-Sports. Además, según la prensa, en 2015 habría suscrito un contrato de 22 mil millones de won con una empresa creada por Choi en Alemania con el pretexto de impulsar la equitación.
El anuncio de la acusación formal coincidió con otro de Samsung en el que la empresa disuelve un órgano que hasta ahora estaba considerado como el que controlaba todo el conglomerado de la firma.
Lee Jay-yong ya había adelantado en diciembre que iba a disolver la Oficina de Estrategia, desde la que se controlaban las actividades de numerosas filiales. Según la prensa surcoreana, la oficina estaba formada por 200 miembros que eran nombrados desde las filiales. En el futuro cada una de las firmas tomará las decisiones por separado.
