CARACAS
AP

El gobierno venezolano entregó dos notas de protesta al encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en Caracas en rechazo a la sanción por narcotráfico que le impuso el Departamento del Tesoro al vicepresidente Tareck El Aissami.

La canciller Delcy Rodríguez se reunió anoche con el encargado de negocios Lee McClenny para entregarle las notas, indicó a través de su cuenta de Twitter el Ministerio de Relaciones Exteriores. En el encuentro Rodríguez exigió al funcionario diplomático «respeto» al vicepresidente, precisó la cancillería.

Las autoridades estadounidenses no han ofrecido hasta el momento comentarios sobre las notas de protesta.

Con El Aissami ya suman a nueve las figuras del oficialismo, incluidos altos funcionarios, gobernadores, congresistas y militares retirados, que han sido objeto de sanciones por parte de Washington por vínculos con el narcotráfico.

La entrega de las notas de protesta se dio horas después de que el presidente Nicolás Maduro condenara las acciones contra el vicepresidente y exigiera al gobierno estadounidense que se «retracte» y ofrezca «excusas».

«Venezuela responderá paso a paso con equilibrio y contundencia», expresó Maduro al asegurar que su gobierno utilizará la vía legal, diplomática y política contra la sanción a El Aissami que consideró una de las agresiones «más temerarias» y «brutales» de Washington.

La sanción del gobierno de Donald Trump es la primera medida contra funcionarios venezolanos desde que en 2014 su predecesor Barack Obama suspendió visas y congeló activos pertenecientes a funcionarios acusados de perpetrar actos de corrupción y violar derechos humanos.

«La verdad es invencible y veremos cómo se desvanecerá esta infame agresión», dijo El Aissami, de 42 años, en respuesta a la sanción que implica la anulación de su visa, la confiscación de sus propiedades en Estados Unidos y la prohibición de realizar transacciones financieras o comerciales con instituciones de ese país.

El vicepresidente indicó que continuará acompañando a Maduro en su equipo ministerial.

El Aissami, una de las figuras más radicales del gobierno, asumió la vicepresidencia a inicios del mes pasado tras gobernar por cuatro años el estado central de Aragua.

El Departamento del Tesoro lo acusó de facilitar el envío de drogas desde Venezuela a través del control de los aviones y las rutas aéreas e indicó que poseía múltiples cargamentos de estupefacientes, algunos de los cuales tenían como destino México y Estados Unidos.

Washington también designó como narcotraficante al venezolano Samark José López Bello, quien fue identificado como un prestanombres del vicepresidente. López Bello negó las acusaciones.

El dirigente opositor Henrique Capriles exigió la noche del martes a El Aissami que se separe de su cargo y que aclare ante las autoridades las acusaciones en su contra.

Asimismo, la coalición opositora pidió a la Fiscalía General de Venezuela que abra una investigación penal y la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, aprobó la creación de una comisión especial para investigar el caso de El Aissami y López Bello.

Artículo anteriorContraloría de Panamá anuncia auditorías de obras de Odebrecht
Artículo siguienteRusia critica demanda de EE. UU. de devolver Crimea a Ucrania