Río de Janeiro/Vitória
DPA

Más de 120 personas murieron en la última semana debido a una ola de delincuencia en el estado brasileño de Espírito Santo, según informaron medios locales, debido a una protesta policial que seguía hoy sin solución.

La capital del estado, Vitória, continuaba semiparalizada por la ausencia de la Policía Militar, que dejó de patrullar las calles desde el sábado debido a una protesta organizada por sus familiares para exigir mejoras salariales.

Debido a que las leyes prohíben a los policías formalmente hacer huelgas, sus esposas organizaron las protestas bloqueando las entradas de los cuarteles para impedir que los agentes salgan a patrullar. Ese tipo de protesta se extendió hoy incluso a algunas zonas de Río de Janeiro, unos 520 kilómetros al suroeste de Vitória.

Artículo anteriorParlamento salvadoreño prorroga por un año medidas anticrimen
Artículo siguientePerú exige a Interpol capturar a Toledo y ofrece recompensa