ESTAMBUL, Turquía
AP
Las autoridades turcas capturaron al hombre que atacó un club nocturno de Estambul en Nochevieja, y hoy confirmaron que se trataba de un ciudadano uzbeco entrenado en Afganistán.
El hombre estaba siendo interrogado por la policía, indicó el ministro Binali Yildirim a la prensa en Ankara. Yildirim expresó su esperanza en que el interrogatorio desvelara las «fuerzas» responsables del ataque, en el que murieron 39 personas y que fue reclamado por el grupo extremista Estado Islámico.
«El canalla terrorista que atacó el lugar de ocio en Nochevieja y causó la pérdida de tantas vidas ha sido capturado», dijo.
«Lo que es importante es que el sospechoso esté capturado y que se revele el poder de las fuerzas responsables», añadió.
El ministro no dio más detalles sobre la detención o las pesquisas, señalando que las autoridades darían más detalles «en su momento».
Por su parte, el gobernador de Estambul, Vasip Sahin, indicó en otra comparecencia poco después que el sospechoso era un ciudadano uzbeco entrenado en Afganistán. Sahin lo identificó como Abdulkadir Masharipov y dijo que había nacido en 1983, sin concretar su fecha de nacimiento. Medios turcos habían publicado que el nombre del sospechoso era Abdulgadir.
El sospechoso, capturado el anoche, confesó haber perpetrado la masacre y sus huellas dactilares coincidían con las del agresor. Puede permanecer detenido hasta 30 días antes de ser procesado y arrestado oficialmente debido al estado de emergencia en Turquía, aprobado después de un intento fallido de golpe de Estado en julio. La fiscalía podría tardar varios meses en prepararse para un juicio.
El gobernador agregó que el detenido es un terrorista con educación que habla cuatro idiomas y está claro que realizó el ataque en nombre del grupo EI. Operaba bajo el alias de «Ebu Muhammed Horasani», añadió.
La operación policial para detenerlo se basó en el análisis de 7 mil 200 horas de videos de cámaras de seguridad e implicó a unos 2 mil policías, incluidos unidades especiales, dijo el gobernador. Las autoridades confiscaron casi 200 mil dólares, dos armas y dos drones en la operación.
«Junto con el terrorista se detuvo a un hombre iraquí, así como a tres mujeres de varios países –de Egipto y de África–», dijo Sahin. «Hay una gran probabilidad de que puedan estar conectados (con el grupo EI) porque se alojaban en la misma casa».
El hijo de cuatro años del principal sospechoso quedó bajo protección de las autoridades, explicó la agencia estatal de noticias Anadolu. El periódico Hurriyet había indicado antes que la esposa del supuesto agresor y su hija de un año habían sido detenidas en una operación policial el 12 de enero.
La milicia radical EI reivindicó el atentado y afirmó que el ataque en Año Nuevo era una represalia por las operaciones militares turcas en el norte de Siria. El hombre identificado como sospechoso llevaba prófugo desde el ataque.
Días después del ataque, el viceprimer ministro Numan Kurtulmus afirmó que una agencia de inteligencia podría haber participado en el suceso, una afirmación que reiteró el lunes. Sin embargo, cuando se preguntó a Sahin sobre ello, declinó hacer comentarios señalando que «es demasiado pronto como para decir nada sobre esa conexión».
La policía realizó además registros a miembros de una presunta célula uzbeka del grupo EI en cinco vecindarios de Estambul y arrestó a varias personas, según Anadolu.