Buenos Aires
DPA

Varios organismos de derechos humanos cuestionaron hoy las declaraciones del presidente argentino, Mauricio Macri, quien dijo no saber el número de desaparecidos durante la última dictadura militar (1976-1983), a la que calificó además como «guerra sucia».

«Es un debate en el que no voy a entrar. No tengo idea si fueron 9 mil o 30 mil. Si son los que están anotados en un muro o son muchos más. Es una discusión que no tiene sentido», dijo el jefe de Estado ayer al ser consultado por el número de desaparecidos que dejó el régimen militar, tema que tiempo atrás ya había generado polémica en su fuerza política.

La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, consideró «muy dolorosas» las declaraciones de Macri al sitio estadounidense BuzzFeed. Criticó además que el presidente hable de «guerra sucia» cuando lo que hubo en la Argentina fue «terrorismo de Estado».

Carlotto consideró que el mandatario «se ocupa de cambiar la historia a su gusto y a su manera», por lo que concluyó que «quiere borrar la historia». «Él tiene la obligación de saber que son 30 mil las personas estimadas desaparecidas, que además no sólo lo dicen los estudios hechos en todos estos años, sino que todos los días se agrega una nueva denuncia», sentenció la líder de la agrupación que busca a los bebés y menores apropiados ilegalmente durante la dictadura.

Una de las referentes de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas, advirtió por su parte que «este modo de expresarse del presidente es alarmante».

«Hay un hostigamiento a los organismos de derechos humanos con las expresiones que hizo Macri y muchas autoridades que lo rodean. Acá hay un desprecio total por los derechos humanos», señaló Cortiñas.

La activista por los derechos humanos alertó que «a medida que pasan los meses, en este gobierno se están acostumbrando a desfigurar la historia como si no hubiera pasado nada» durante la última dictadura.

El Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel recomendó en tanto a Macri «aprender y no generar más tensiones».

«Es preocupante que el presidente de la Nación primero quiera desconocer lo que pasó en el país y después quiera confundir hablando de guerra sucia. Aquí no hubo una guerra, hubo una represión brutal contra sectores sociales, religiosos, sindicalistas, estudiantes y bebés», subrayó el titular del Servicio Paz y Justicia (Serpaj).

El número de desaparecidos durante la última dictadura ya generó polémica en torno al PRO, el partido de centro-derecha que encabeza Macri y que, a su vez, es el que también gobierna la ciudad de Buenos Aires.

Precisamente, fue en la capital donde se reabrió la polémica en enero. El entonces ministro de Cultura porteño, Darío Lopérfido, dijo que no eran 30 mil los desaparecidos y que «se arregló ese número en una mesa».

Los dichos de Lopérfido causaron una ola de rechazo de parte de organismos de derechos humanos e intelectuales, además de fuertes críticas de la sociedad en general. Finalmente, presentó la renuncia a su cargo como ministro.

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