Gmund, Alemania
DPA

El primer ministro bávaro, Horst Seehofer, socio de la canciller Angela Merkel en el Gobierno alemán, se distanció hoy de manera tajante de la famosa frase «Lo lograremos» esgrimida por la mandataria alemana para convencer a sus compatriotas de que podrán gestionar la gran afluencia de refugiados al país.

El líder de la Unión Cristianosocial, partido hermanado de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel, no lo ve así y aprovechó el cierre de una reunión del Gobierno bávaro para distanciarse una vez más de la política de refugiados de la canciller y de la famosa frase que la mandataria germana volvió a repetir esta semana.

En su opinión, la frase de Merkel «Lo lograremos» no podría hacerla suya ni aunque quisiera. «El problema es demasiado grande», alertó sobre el gran número de refugiados en el país, que en 2015 llegó hasta los 1,1 millones de personas.

Seehofer, una de las voces más críticas del Gobierno alemán con la política de Merkel desde que comenzara la crisis de los refugiados el pasado año, ve de manera «demasiado insatisfactoria» las decisiones tomadas hasta ahora.

«Y por ello debemos en Alemania mejorar en gran medida en todos los ámbitos», afirmó al mismo tiempo que aseguró que no lo dice de manera «frívola» y que no quiere ninguna disputa. Para Seehofer no se trata de diferencias entre los dos partidos, si no de no decir «mentiras a la opinión pública».

Asimismo, Seehofer aprovechó su comparecencia para insistir en la necesidad de limitar la entrada de refugiados al país después de los ataques registrados la semana pasada en Baviera, dos de ellos perpetrados por solicitantes de asilo.

«Limitar la inmigración es un requisito para la seguridad en el país», afirmó el político bávaro. Sin embargo, la limitación es también un requisito para la integración de aquellos que necesiten recibir protección, indicó.

En los últimos meses el número de refugiados que llegan al país se redujo drásticamente gracias principalmente al acuerdo firmado entre la Unión Europea y Turquía.

Alemania fue sacudida por una serie de hechos violentos desde el 18 de julio. El pasado sábado, un refugiado sirio se suicidó y causó heridas a 15 personas al detonar una bomba en su mochila en la entrada de un concierto en la localidad de Ansbach.

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