KABUL
AP
Asesores militares británicos se dirigían a una provincia afgana donde feroces combates ardían entre fuerzas oficiales y el Talibán.
Los sucesos ocurren en Helmand, en el sur del país, donde los insurgentes prácticamente han tomado un distrito estratégico.
Los hechos ocurren después de que un ataque suicida del Talibán mató a seis militares estadounidenses cerca de una base de Kabul, en el más mortífero ataque contra fuerzas de Estados Unidos desde agosto.
Un comunicado del Ministerio de Defensa de Gran Bretaña dijo la tarde del lunes que «un grupo reducido de personal militar del Reino Unido» ha ido a Helmand «para dar asesoramiento». Hay 450 efectivos británicos en Afganistán como parte del programa de entrenamiento de fuerzas locales que la OTAN desarrolla.
Las autoridades afganas estaban enviando refuerzos a Helmand el martes, dijeron funcionarios. El gobernante ejecutivo Abdula Abdula considera la seguridad de Helmand «nuestra máxima prioridad», según su portavoz Javid Faisal.
El Talibán se ha estado acercando a tomar el pleno control del distrito Sangin y la mayoría de los edificios gubernamentales están en manos de los insurgentes.
Una fuente oficial en Helmand dijo que sólo una base del ejército afgano sigue en manos las fuerzas oficialistas, y se encuentra rodeada por talibanes.
La fuente, que pidió no ser identificada, dijo que comandos afganos «tratarán de rescatar a los soldados que permanecen atrapados en la base».
