WASHINGTON
AP
Los ataques aéreos rusos en Siria han planteado conversaciones en el Pentágono sobre si Estados Unidos debería recurrir a la fuerza para proteger a los rebeldes sirios entrenados y equipados por Estados Unidos si se ven atacados por fuego ruso.
Altos mandos del ejército y responsables de defensa estudian las complicadas cuestiones legales y de política exterior afectadas, y sopesan los riesgos de emplear la fuerza en respuesta a un ataque ruso, señalaron varios funcionarios.
El dilema más general, indicaron, afecta a cómo debería responder el gobierno a lo que el secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, describe como «operaciones militares indiscriminadas contra la oposición siria», emprendidas por Rusia.
Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a comentar públicamente conversaciones aún en desarrollo.
