Por MICHELLE FAUL
CONAKRY / Agencia AP
El presidente francés François Hollande trajo el viernes un mensaje de esperanza a Guinea, donde miles aplaudieron, tocaron tambores y bailaron junto a los caminos mientras esperaban poder ver al primer gobernante occidental que visita un país asolado por el ébola.
El mandatario guineano Alpha Conde recibió a su colega francés en el aeropuerto y afirmó que si Hollande es capaz de visitar el país, entonces cualquier puede hacerlo.
«Hay esperanza», declaró Hollande. «La esperanza de aquellos que se han sanado. La esperanza de que podemos controlar esta epidemia».
Sin embargo, el mandatario francés también advirtió que el aislamiento «en una crisis de salud puede devenir en una crisis económica que a su vez puede desatar una crisis política».
Guinea será el año entrante escenario de elecciones presidenciales y Conde es el primer mandatario elegido democráticamente desde que el país se independizó de Francia en 1958.
Durante su visita, que duró unas ocho horas, Hollande acudió a un centro de tratamiento para enfermos de ébola dirigido por Médicos Sin Fronteras, la principal organización que brinda atención contra la epidemia, y felicitó por su valor al personal médico francés y guineano.
Durante una reunión a la que asistió Conde, Hollande escuchó los pormenores actualizados de la enfermedad que presentaron grupos de asistencia, así como autoridades guineanas y francesas.
«El ébola es algo más que una enfermedad. Quien no tiene ébola tiene vida, sueños. Quien tiene ébola es tratado como una persona muerta, aun si ha sanado», dijo la sobreviviente Fanta Camara.
Los sobrevivientes del ébola han sido expulsados de sus aldeas y despedidos de sus empleados al tiempo que cargan un enorme estigma social.
Camara dijo que el ébola había «aislado totalmente» a Guinea, pero Hollande «muestra que no estamos solos».
El mandatario galo tenía previsto volar el viernes por la noche a Dakar, Senegal, para participar en la cumbre de países francófonos. Indicó que en esa reunión se pronunciaría nuevamente por la movilización internacional para combatir la epidemia.