Freetown,
Agencia dpa
Un equipo de enterradores en Sierra Leona, uno de los países africanos más afectados por el ébola, se ha declarado en huelga y ha dejado 15 cadáveres, con un elevado potencial de contagio, en las calles de la tercera ciudad más grande del país, Kenema.
A la entrada del hospital de la ciudad hay dos cadáveres.
La razón de la protesta es que los empleados no han recibido su salario desde octubre, dijo Hassan Soko, un trabajador del hospital.
«Arriesgamos nuestra vida por este país, por ello deberían pagarnos lo que nos deben puntualmente», reclamó Soko. Según las informaciones, la policía intervino para impedir que la tensión se agravase.
El ébola se transmite a través de los fluidos corporales. En contacto con cadáveres de enfermos de ébola está considerado especialmente peligroso.
En Sierra Leona hay un equipo de enterradores creado para atender estos casos. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cifra de los infectados desde que estalló el brote en varios países de África Occidental ya asciende a 15 mil 300 personas.