Estocolmo,
Agencia dpa
Según declaró en Estocolmo el secretario permanente de la Academia, Peter Englund, Modiano es «el Marcel Proust de nuestro tiempo». Y es que el decimoquinto autor francés distinguido con el Nobel -el último fue J.M.G. Le Clézio en 2008- ha sabido rastrear como pocos en el pasado para ayudar a sus personajes en la búsqueda de su propia identidad.
Precisamente el primer pensamiento de Modiano al conocer la noticia fue para los anteriores laureados franceses. Resulta «un poco irreal» verse confrontado con ellos, declaró tras conocer la noticia, que recibió cuando estaba almorzando junto a su mujer en un restaurante.
Modiano, de 69 años, debutó en el panorama literario en 1968 con «El lugar de la Estrella», que se enmarcaba en la Francia ocupada por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Ese escenario se convertiría en una constante en su obra, con ejes como la memoria, el olvido, la identidad y la culpa.
Su «merecido» galardón lo celebraban hoy también el primer ministro galo, Manuel Valls, y el presidente François Hollande: el Nobel «consagra» una obra que explora las «sutilezas de la memoria y la complejidad de la identidad», dijo el mandatario. «La República está orgullosa (…) del reconocimiento mundial de uno de nuestros mayores escritores», añadió Hollande.
El propio Modiano explicaba en una de las escasas entrevistas que concede que intenta «atravesar la capa del olvido en las personas y las cosas». Y es que según afirmó a dpa el Jorge Herralde, editor de la mayoría de traducciones de su obra al castellano, el francés «nunca va a la televisión» y «tiene una timidez enfermiza».
A lo largo de sus más de cuatro décadas de trayectoria literaria, Modiano ha publicado más de 30 novelas traducidas a una treintena de idiomas. Sus tres primeras obras -«El lugar de la Estrella», «La ronda de noche» y «Los bulevares periféricos»- se consideran una especie de trilogía sobre la ocupación.
Por esa última, posteriormente traducida como «Los paseos de la circunvalación», se llevó el Gran Premio de Novela de la Academia Francesa en 1972. Y seis años después, el escritor se alzó con el prestigioso premio Goncourt por «La calle de las bodegas oscuras» (o «Calle de las tiendas oscuras»).
En muchas ocasiones, son detalles irrelevantes los que catapultan la trama en las historias de Modiano, como una cesta en «El rincón de los niños» o un anuncio de periódico en «Dora Bruder», donde indaga en la historia real de una adolescente enviada a Auschwitz. Y en todas ellas domina un estilo directo que pone especial hincapié en la ambientación, cartografiando París al detalle.
Algunas de sus novelas, como «Dora Bruder», tienen un carácter más documental, mientras que otras como «Un pedigrí», que dedicó a su padre recién fallecido, son más autobiográficas. Su última obra traducida al castellano es «La hierba de las noches» y acaba de publicar «Pour que tu ne te perdes pas dans le quartier».
Hijo de un comerciante judío y una actriz belga, sus vínculos con el cine van más allá de la adaptación que varios realizadores hicieron de sus novelas: coescribió el guión del drama nominado a un Oscar «Lacombe Lucien» (1974) y firmó entre otros el libreto de «Bon voyage» (2003), protagonizada por Isabelle Adjani y Gérard Depardieu. Además, fue miembro del jurado del Festival de Cannes que entregó la Palma de Oro a «Dancer in the Dark», de Lars von Trier.
«Estoy deseando escuchar los argumentos por los que me eligieron», dijo el propio Modiano tras el anuncio del galardón. «Uno tiene una visión confusa de los libros que escribe. Sobre todo, porque tengo la impresión que llevo 45 años escribiendo el mismo libro», declaró el autor, que dedicó el Nobel a su nieto sueco.
El Nobel de Literatura, dotado con ocho millones de coronas (unos 880.000 euros/1,1 millones de dólares), lo entregará en Estocolmo el rey Carlos XVI Gustavo de Suecia el 10 de diciembre, día de la muerte de Alfred Nobel. El año pasado, el galardón fue para la escritora canadiense Alice Munro.