BOGOTÁ
Agencia DPA

La masacre se registró en la noche del viernes, cuando varios policías hallaron al interior del predio ubicado en un exclusivo sector de Cali a los ocho hombres atados de pies y manos y con disparos en la cabeza.

El comandante de la Policía de Cali, general Hoover Penilla, indicó que de acuerdo con las primeras investigaciones algunos de los hombres tenían antecedentes penales y pertenecían a bandas delincuentes.

«(Hubo) una cita a la que llegaron varios carros y cerca de 20 personas. De un momento a otro los grupos se dividen y unos someten a otros y los amarran para luego darles muerte. Todo tiende a indicar que se trata de una vendetta de personas dedicadas al narcotráfico, pero es algo preliminar», precisó el oficial.

Penilla indicó además que las autoridades intentan determinar si la finca pertenece a Kener Valencia, recientemente extraditado a Estados Unidos por el delito de narcotráfico.

Por su parte, el comandante de la regional cuatro de la Policía que opera en esa zona del país, general Omar Rubiano, detalló que los cuerpos «estaban maniatados y con signos de tortura». Además, según indicó el comandante, «en el sitio se encontraron armas de largo alcance».

Agentes del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía realizaron el levantamiento de los cadáveres para su posterior identificación.

Durante la inspección del predio, fueron hallados a algunos metros de distancia varios vehículos y teléfonos móviles que presuntamente fueron abandonados por los responsables del hecho.

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