Por ZARAR KHAN y ASIF SHAHZAD
ISLAMABAD / Agencia AP
La violencia ha intensificado un enfrentamiento político en el que el astro de cricket político opositor Imran Khan y el clérigo anti gobierno Tahir-ul-Qadri han encabezado protestas que demandan la renuncia del primer ministro Nawaz Sharif. Los manifestantes dicen que la elección que le llevó al poder el año pasado fue fraudulenta.
Respaldado por el parlamento y muchos partidos políticos, Sharif se ha negado a renunciar, mientras negociadores han tratado de convencer a Qadri y Khan a poner fin a las protestas.
Los manifestantes se congregaron en la capital hace más de dos semanas, pero las protestas hasta ahora han sido pacíficas.
Los acontecimientos tomaron un giro ominoso el sábado, cuando cientos de personas cerca del edificio del parlamento se dirigieron hacia la residencia del primer ministro. Inicialmente, la policía antimotines mostró moderación. Pero cuando la muchedumbre comenzó a apartar los contenedores usados como barricadas, los agentes usaron gas lacrimógeno, bastones y balas de goma.
Numerosos manifestantes, incluyendo mujeres, usaron martillos y barras de hierro para derribar una cerca en las afueras del parlamento, lo que permitió que centenares de personas ingresasen a los jardines y el área de estacionamiento, de acuerdo con un fotógrafo de la Asociated Press que estaba presente y reportes de la televisión paquistaní.
El jefe de la policía de Islamabad, Khalid Khattak, dijo que los manifestantes estaban armados con grandes martillos, hachas, cortaalambres e incluso una grúa.
El ministro de defensa Khwaja Mohammad Asif dijo que la policía más tarde logró desalojar a la mayoría de los manifestantes del área de estacionamiento y los céspedes del edificio del parlamento.
«Ahora sólo quedan allí mujeres y niños, y ellos pueden albergarse allí todo el tiempo que quieran», dijo.
Un hombre se ahogó en una zanja cuando la muchedumbre de la que formaba parte fue bombardeada con gas lacrimógeno y otro murió en un hospital luego que vals de caucho le perforasen el estómago y los intestinos, dijo el doctor Wasim Khawaja, un alto funcionario del hospital.
Más de 300 personas —incluyendo mujeres, niños y policías— fueron trasladados a dos hospitales del gobierno en la capital, dijeron médicos y policías. Muchos presentaban lesiones por inhalar gas lacrimógeno, recibir golpes con bastones y por impactos de balas de goma, dijo el médico Javed Akram, que dirige el principal hospital de la capital.
Akram dijo que 182 heridos fueron tratados en el Instituto de Ciencias Médicas de Pakistán, y agregó que entre los heridos había 37 policías.
Otras 152 personas fueron llevadas a un hospital del gobierno cerca de la escena de los choques, dijo otro médico, el doctor Tanvir Malik.
