Madrid,
Agencia AP
Se trata de Miguel Pajares, de 75 años y de la orden de San Juan de Dios, y de las hermanas Chantal Pascaline Mutwamene, congoleña, y Paciencia Melgar, de Guinea Ecuatorial.
El religioso español, que vive en el país africano desde hace casi ocho años, y las dos hermanas de la orden Inmaculada Concepción se encuentran aislados en el hospital San José de Monrovia junto con otras tres personas. Los seis son trabajadores del centro sanitario.
El religioso sufría fiebre y cansancio, por lo que ayer se le hizo el test del ébola. Él y las dos misioneras «han dado positivo», informó la organización de cooperación Juan Ciudad ONGD.
Pajares atendió al director del centro hospitalario, el camerunés Patrick Nshamdze, hasta que el sábado murió a causa del ébola. La situación en el hospital «es grave», indicó la ONG española.
El brote del virus, que comenzó en Guinea Conakry y se extendió luego a Liberia y Sierra Leona, deja ya más de 1.600 infectados y cerca de 890 muertos, una cifra que lo convierte en el más mortífero de la historia. En Nigeria se han dado dos casos.
Para el ébola no hay vacuna ni cura conocida. El sacerdote español ha estado tomando paracetamol para la fiebre y los dolores y líquidos contra la deshidratación.