Por ANNE MARIE GARCÍA
LA HABANA
Agencia AP

En el acto de hoy, el presidente Raúl Castro estuvo en primera fila, pero no hizo uso de la palabra. Estuvo vestido de uniforme verde olivo y rodeado por altos funcionarios de su gobierno así como centenares de invitados.

El 26 de julio de 1953, un grupo de jóvenes encabezados por el líder cubano Fidel Castro y su hermano menor Raúl, asaltaron el cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, ambas ciudades de la región oriental de la isla, a unos 800 kilómetros al este de la capital.

La toma de las fortalezas militares fracasó y en el intento murieron varios de los asaltantes y otros fueron apresados —entre ellos los hermanos Castro_, pero con estas acciones los rebeldes se dieron a conocer y lograron apoyo popular. A partir de entonces se fraguó una revolución que finalmente terminó con el derrocamiento de la dictadura de Fulgencio Batista en 1959.

A partir de entonces el 26 de julio reemplazó al 20 de mayo como día de la independencia y día de la fiesta nacional en la isla.

El orador principal del acto de hoy fue Ramiro Valdés, uno de los comandantes de la revolución encabezada por Fidel Castro y su hermano menor, Raúl. «Esta unidad debemos preservarla por sobre todas las cosas… No tenemos otra alternativa que seguir luchando cada día hasta el último aliento por la Patria, con la Revolución y con el socialismo» expresó.

El pueblo cubano mantiene el «espíritu de lucha sin tregua» que tenía hace 61 años, aseguró Ramiro Valdés, de 82 años.

Fidel Castro fue primer ministro de Cuba desde 1959 hasta 1976 y a partir de esa fecha fue presidente de la isla hasta que enfermó de gravedad en julio de 2006, cuando delegó el poder en su hermano menor, Raúl. Este último resultó electo presidente de Cuba en 2008 y después en el 2013 cuando anunció que sería su segundo y último mandato.

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