El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio. Foto La Hora / EFE - ALEX WROBLEWSKI

El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, dio a conocer la nueva restricción que el Gobierno de Donald Trump impone a funcionarios de países centroamericanos. 

Se trata del retiro de la visa americana a los funcionarios que se encuentren “colaborando con las misiones médicas cubanas”, hasta el momento no han sido revelados los nombres o los países exactos de Centro América a los cuales afecta la decisión. 

“Estados Unidos se toma en serio sus esfuerzos para promover la rendición de cuentas de quienes están vinculados con el trabajo forzoso y la explotación del personal médico cubano. Visitar Estados Unidos con visa es un privilegio”, indicó Rubio en una publicación en su cuenta de la red social X. 

Con la implementación de estas restricciones de visado, añadió, Estados Unidos envía «un mensaje claro sobre su compromiso con la promoción de los derechos humanos y el respeto a los derechos laborales en todo el mundo».

De acuerdo con información compartida por el medio Infobae, esta medida también afectará las familias de los funcionarios implicados en la sanción, ya que el Gobierno de Trump considera esta una forma de trabajo forzado para los trabajadores provenientes de Cuba. 

«El programa de exportación de mano de obra cubana abusa de sus participantes, enriquece al corrupto régimen cubano y priva a los ciudadanos de la isla de la atención médica esencial que tanto necesitan», afirmó Rubio.

“Lo siento pero ya no lo soporto más”: Elon Musk arremete en contra del Gobierno de Trump

Rubio, de origen cubano, también instó a otros países a adoptar medidas similares.

En febrero, Estados Unidos ya había ampliado la política de restricción de visados contra personas que se benefician de lo que califica como “explotación laboral” de trabajadores cubanos en el extranjero, incluyendo a quienes participan en la organización de misiones médicas.

Cuba, por su parte, ha rechazado categóricamente las acusaciones de Washington, defendiendo su programa de cooperación médica, una de las principales fuentes de divisas del país, y denunciando lo que considera una «campaña» en su contra y contra sus profesionales de la salud.

En la misma línea, líderes de la Comunidad del Caribe (Caricom), cuyos sistemas de salud dependen en gran medida del personal médico cubano, defendieron la contratación de estos profesionales y negaron que se trate de una forma de explotación.

Artículo anteriorRafael Curruchiche insinúa que medios de comunicación se robaron pruebas contra Stalling
Artículo siguienteMP gira caso Odebrecht: se centra en acuerdos e ignora posibles sobornos