El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció ayer que firmará un decreto para liberar a todos los presos de las cárceles federales que tengan más de 75 años o hayan pasado más de una década en prisión sin haber sido condenados por delitos graves.
Esto también incluye a aquellos presos que hayan sufrido torturas –según el Protocolo de Estambul o sean mayores de 65 años y presenten enfermedades crónicas, tal y como ha puntualizado en su rueda de prensa diaria.
Así, ha matizado que el decreto será elaborado por la Secretaría de Gobernación (Segob) y estará formado por cuatro puntos, que serán presentados la próxima semana, según informaciones del diario ‘Milenio’.
En este sentido, aquellas personas que lleven 10 años en prisión pero no hayan sido condenados por delitos graves o «de sangre» también serán puestos en libertad. «Entonces estas cuatro acciones van a formar parte de un decreto que voy a firmar y que va a elaborar la Secretaría de Gobernación. Lo vamos a elaborar la semana próxima para presentarlo y publicarlo», ha dicho el mandatario mexicano.
López Obrador ha matizado que es «importante que se tome en cuenta que hay muchos detenidos, reclusos, internos que no tienen sentencia y que no sólo es fuero federal, también es fuero común y es la mayoría».
«Ojalá y las autoridades estatales tomen cartas en este asunto», ha resaltado antes de asegurar que la «Secretaría de Gobernación tiene una nueva función», que incluye la «protección de los Derechos Humanos y de la justicia». Además, ha hecho un llamamiento a las autoridades locales para aplicar medidas similares en los distintos estados del país.