Donald Trump finalmente tendrá su momento en el Madison Square Garden.
A poco más de una semana de las elecciones, el expresidente y candidato presidencial republicano subirá al escenario en este icónico lugar en un mitin de campaña para dar su mensaje de cierre contra Kamala Harris.
“Madison Square Garden es el centro del universo”, dijo Jason Miller, asesor de campaña de Trump, aludiendo a la historia del anfiteatro, como “La Pelea del Siglo” de 1971.
El mitin es uno de varios desvíos que Trump realiza a estados reñidos, incluyendo Coachella, California, conocido por su festival, y Nueva Jersey en verano. También hizo campaña en el Bronx.
Algunos demócratas critican estos eventos como pura vanidad, pero le garantizan a Trump la atención mediática que ansía.
Además de energizar a su base, Trump busca cortejar a votantes indecisos, muchos de los cuales no siguen medios tradicionales. Ha estado en podcasts populares y su campaña ha generado contenido viral, como su reciente visita a McDonald’s, con 40 millones de vistas en TikTok.
En tendencia:
Roxana Baldetti ya no quiere acercarse a la Torre de Tribunales
En tres años, Walter Mazariegos ha dispuesto de un presupuesto de Q11 mil 500 millones; la mayoría para pagos de personal
Integración aduanera, Guatemala-El Salvador, se concretará el 18 de junio; estos son los beneficios para ambos países
Billete de 1 quetzal obtiene galardón internacional como el mejor conmemorativo del 2025
Vendedora resulta herida por vehículo que volcó en zona 10 capitalina
“No solo hablará en el Madison Square Garden; lo verán en todo el país”, dijo el exrepresentante republicano Lee Zeldin, aliado de Trump.
Kamala Harris también realiza eventos fuera de estados reñidos, como en Houston junto a Beyoncé y en Washington.
Trump estará acompañado por aliados como Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX. Siempre ha soñado con un mitin en el Madison Square Garden. “Nueva York es parte de su ADN”, comentó Ed Cox, presidente del Partido Republicano en Nueva York. El evento también busca recaudar fondos, área en la que Trump está rezagado frente a Harris.
Nueva York no vota por un republicano en 40 años, pero Trump insiste: “Creemos que hay una oportunidad,” mencionando problemas de inmigración y delincuencia. Trump mantiene una relación complicada con Nueva York, su ciudad natal, donde ha enfrentado múltiples cargos judiciales.
