Las autoridades manejan la hipótesis de que el odio racial fue el motivo de la matanza en un supermercado en una zona de gran población negra en Buffalo, en el estado de Nueva York.
Clientes y un policía retirado que trabajaba como guardia de seguridad estaban entre los 10 muertos de la masacre perpetrada el sábado por un adolescente blanco.
La policía dijo que el adolescente, Payton Gendron, le disparó el sábado a un total de 11 personas negras y dos blancas en el supermercado Tops Friendly Market y que transmitió en vivo el ataque mediante una cámara adosada a su cuerpo, antes de rendirse ante los agentes.
Entre los fallecidos estaba Aaron Salter, un policía retirado y guardia de seguridad, quien le disparó varias veces a Gendron, informó el jefe policial de Buffalo, Joseph Gramaglia. Una bala alcanzó el blindaje del agresor, pero no lo penetró. Gendron seguidamente mató a Salter, antes de dispararle a las otras víctimas.
También murió Ruth Whitfield, de 86 años y madre del retirado jefe de bomberos de Buffalo Garnell Whitfield, quien en declaraciones al diario Buffalo News alabó a su madre diciendo que “fue una madre para los huérfanos”. Ella fue “una bendición para todos”, agregó.
Otra de las víctimas fue Katherine Massey, quien había ido al local para hacer compras, de acuerdo con el diario.
No quedó claro de momento por qué Gendron viajó 320 kilómetros (200 millas) desde Conklin, estado de Nueva York, hasta Buffalo y hasta ese supermercado en particular en una zona de mucha población negra, pero imágenes de la plataforma Twitch parecían mostrar un insulto racista grabado en el fusil que usó en el ataque junto con el número 14, posible referencia a un lema de supremacistas blancos.
El alguacil del condado de Erie, John García, calificó expresamente el tiroteo como un crimen de odio. “Esto fue maldad pura”, agregó García.
Twitch dijo en un comunicado que finalizó la transmisión de Gendron “menos de dos minutos después de que comenzara la violencia”.
El tiroteo masivo perturbó aún más a una nación asolada por las tensiones raciales, la violencia armada y una serie de crímenes de odio. Un día antes, la policía de Dallas había dicho que estaba investigando los tiroteos en el barrio coreano de la ciudad como crímenes de odio.
El ataque de Buffalo se produjo apenas un mes después de que un tiroteo en el metro de Brooklyn hirió a 10 y poco más de un año después de que 10 murieran en un tiroteo en un supermercado de Colorado.
Gendron, confrontado por la policía en el vestíbulo de la tienda, se puso el rifle en el cuello, pero los agentes lo convencieron de que lo dejara caer. Fue procesado más tarde el sábado por un cargo de asesinato y compareció ante un juez con un overol de papel.
Un policía dijo a The Associated Press que los detectives estaban investigando si él había publicado un manifiesto en línea. El agente no tiene permitido hablar públicamente sobre el asunto y lo hizo bajo condición de anonimato.
La policía de Buffalo se negó a comentar sobre un documento que aparentemente explica las creencias racistas, antiinmigrantes y antisemitas del atacante, incluido el deseo de expulsar de Estados Unidos a todos los que no sean de ascendencia europea. El documento indica que se inspiró en el hombre armado que mató a 51 personas en dos mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda, en 2019.