Los ministros del Interior de Gran Bretaña y Francia se reunirán hoy en medio de una ola creciente de personas que realizan la peligrosa travesía del Canal de la Mancha en embarcaciones pequeñas.
Miles de migrantes han desembarcado en las playas del sureste de Inglaterra en estos días de clima estival. Tan solo el lunes arribaron 785, según la secretaría del Interior británica. Más de 12,000 han realizado el cruce este año, según la agencia noticiosa británica Press Association. En 2020 unas 8,500 personas intentaron la travesía y varias murieron.
Desde hace mucho tiempo los migrantes parten del norte de Francia hacia Gran Bretaña, ocultos en camiones o transbordadores. Desde que la pandemia de coronavirus trastornó el transporte internacional, muchos lo intentan en botes o lanchas pequeñas organizados por traficantes de personas.
Londres y París han tratado durante años de detener las travesías, pero sin mucho éxito. Meses atrás, Gran Bretaña acordó darle a Francia 54 millones de libras (74 millones de dólares) para ayudar a financiar la duplicación del personal policial que patrulla las fronteras.
Londres aún no ha desembolsado esa suma, y la secretaria de Interior británica Priti Patel ha insinuado que podría retenerla si Francia no hace mayores esfuerzos para detener los botes. Tiene prevista una reunión con su contraparte francés Gerald Darmanin durante un encuentro de ministros del G7 que comenzará en las próximas horas.