El excandidato presidencial opositor Ricardo Anaya —quien se disputó el poder con el actual mandatario, Andrés Manuel López Obrador en los comicios de 2018— anunció el lunes que se mantendrá fuera de México, ante lo que considera una persecución política.
En un video publicado en redes sociales, Anaya dijo que recibió un citatorio para acudir el próximo jueves al Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte de la capital mexicana. Sin precisar por qué es procesado, Anaya indicó que «los delitos de los que me acusan sumarían 30 años de cárcel» y sostuvo que es inocente.
«En tiempos de autócratas como López Obrador, el exilio es la única alternativa», dijo el político del Partido de Acción Nacional (PAN) al anunciar que se mantendrá fuera de México y acusar al mandatario mexicano de buscar encarcelarlo para evitar que pueda participar como candidato en las elecciones presidenciales del 2024. Anaya no precisó donde se encuentra en la actualidad.
El exdirector de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, quien enfrenta un proceso judicial por presuntos sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, presentó el año pasado una denuncia en la Fiscalía General contra el excandidato presidencial por supuestos sobornos que habría recibido para aprobar una reforma energética.
Anaya sería imputado por los delitos de lavado de dinero, cohecho y asociación delictuosa, confirmó una integrante del equipo del político.
La AP solicitó a colaboradores de Anaya y la Fiscalía General una copia del citatorio y más detalles sobre los delitos por los que sería imputado el político, pero de momento no tuvo respuesta.
López Obrador negó que busque encarcelar a Anaya y recordó en su conferencia matutina del lunes que el caso se desprende de una investigación contra Lozoya —un excolaborador del expresidente Enrique Peña Nieto (2012-2018)— quien se encuentra en libertad condicional mientras enfrenta el proceso por corrupción.
«Él (Anaya) pensando que así, echándome la culpa, sintiéndose perseguido, la iba a librar. Muy mal», afirmó el mandatario, quien dijo que las acciones de Anaya son una «maniobra politiquera». Además, lo exhortó a que enfrente la situación en México.
«El que nada debe, nada teme. Él debe presentar pruebas y hablar con la verdad si tiene su conciencia tranquila», agregó.
La secretaria general del partido oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Citlalli Hernández, también desestimó las afirmaciones de Anaya, al que llamó «YouTuber», y dijo en su cuenta de Twitter que «quiere coronarse líder de oposición, se autoexilia para jugar a hacer política con videos desde su casa en Atlanta».
Al rechazar el proceso contra Anaya, el expresidente y miembro del PAN, Felipe Calderón, dijo en su cuenta de Twitter que «lo que queda claro es que en México se libera y elogia a los delincuentes y se persigue a los opositores». Los senadores del PAN también se solidarizaron con Anaya y expresaron en un comunicado que «estamos viviendo el autoritarismo en toda su expresión. Este gobierno persigue a Ricardo Anaya porque ha señalado los fracasos de López Obrador».
