Los vientos avivaron el martes el incendio forestal Dixie, el más grande actualmente en Estados Unidos, que avanzaba a unos cuantos kilómetros de una ciudad donde las autoridades pidieron a la gente evacuar sus viviendas.
Las autoridades de la pequeña comunidad montañosa de de Susanville, de unos 18,000 habitantes y cercana de Janesville, emitieron órdenes de evacuación debido a la proximidad de las llamas.
«El fuego avanzó rápido anoche» luego de que los vientos llegaron el lunes por la tarde, precisó el portavoz de los bomberos, David Janssen, la madrugada del martes.
Los bomberos luchaban para evitar que el incendio avanzara hacia Susanville, una cabecera del condado del norte de California, y otras pequeñas comunidades montañosas.
Los meteorólogos emitieron una alerta roja sobre las condiciones climáticas que son críticas para los incendios, como ráfagas de hasta 64 km/h (40 mph) durante todo el martes.
Susanville es la sede del condado de Lassen y la ciudad más grande a la que se ha acercado el incendio Dixie, llamado así por la carretera donde comenzó el mes pasado. La antigua ciudad minera y maderera de Sierra Nevada tiene dos cárceles estatales, una cárcel federal cercana y un casino.
En la ciudad caía ceniza del fuego que avanzaba y un comunicado del Departamento de Policía instó a los residentes a «estar alerta y listos para evacuar» si el incendio amenaza a la ciudad, aunque no se había emitido una advertencia formal de desalojo.
El incendio Dixie ha quemado más de 2,330 kilómetros cuadrados (900 millas cuadradas) en el norte de la Sierra Nevada y el sur de la cordillera de las Cascades desde que comenzó el 13 de julio antes de fusionarse con el incendio Fly, de menor tamaño. Hasta el momento está contenido en menos de un tercio.
En el otro lado del país, un incendio forestal en el noreste de Minnesota continúa propagándose y el Servicio Forestal de Estados Unidos informó que decenas de viviendas fueron evacuadas. El incendio cerca del lago Greenwood en el Bosque Nacional Superior afectaba unos 8 kilómetros cuadrados (3.1 millas cuadradas) el martes mientras los bomberos combatían el fuego desde tierra y aire.