MADRID / AP
Casi 5,000 personas se encuentran en cuarentena después de que estudiantes de preparatoria que vacacionaban desataron un fuerte brote de COVID-19 en la isla de Mallorca, en el Mediterráneo, indicó un alto funcionario el lunes.
Las autoridades han confirmado casi 1.200 casos positivos a consecuencia del brote, dijo Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias de España.
Los adolescentes, que celebraban el fin de sus exámenes de admisión a la universidad la semana pasada, crearon el “caldo de cultivo perfecto” para el virus al mezclarse con otros de diversas partes de España y el extranjero, declaró Simón en una conferencia de prensa.
Las autoridades de salud de Mallorca efectuaron pruebas diagnósticas masivas a cientos de estudiantes después de que se tornó evidente que había un brote. Se cree que se extendió luego de que cientos de jóvenes se reunieron en un concierto y fiestas callejeras.
Hasta ahora las autoridades han rastreado a 5.126 viajeros a Mallorca. El origen de más de 900 casos de COVID-19 en ocho regiones del territorio continental de España ha sido rastreado hasta el brote.
Gran cantidad de adolescentes infectados siguen en la isla. A algunos se les mantiene en sus habitaciones de hotel, mientras que otros han sido trasladados a un hotel que las autoridades locales están utilizando para aislar a los que tienen síntomas moderados o se sospecha que están infectados.
Simón hizo notar que las edades de los padres de los adolescentes oscilan probablemente entre los 45 y los 55 años, y no todo ese grupo etario ha recibido las dos dosis de alguna vacuna contra el COVID-19, por lo que podría haber contagios comunitarios.