Un alto diplomático ruso advirtió hoy que Rusia estará lista para disparar contra buques de guerra si éstos ignoran sus advertencias, luego de un incidente la víspera en el Mar Negro ,en el que un destructor británico navegó cerca de Crimea, en una zona que Rusia dice que son sus aguas territoriales.
Rusia dijo la víspera que una de sus naves de guerra hizo disparos de advertencia y que uno de sus aviones lanzó bombas al paso del destructor británico Defender a fin de alejarlo de las aguas cerca de Sevastopol.
Sin embargo, Gran Bretaña negó esa versión e insistió en que no hubo disparos de advertencia cerca de su barco y que estuvo en aguas ucranianas.
Fue el primer incidente desde la Guerra Fría en el que Moscú utiliza munición de guerra para disuadir a una nave de la OTAN, reflejo del aumento de las amenazas crecientes de choques militares entre Rusia y Occidente.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, dijo el jueves que «la inviolabilidad de las fronteras rusas es un imperativo absoluto». Agregó que las protegerá «por todos los medios, diplomáticos, políticos y militares si es necesario».
Dijo sarcásticamente que la Armada británica debería cambiar el nombre de su destructor de «Defender» (Defensor) a «Aggressor» (Agresor) y advirtió que «quienes intenten probar nuestra fuerza están corriendo un enorme riesgo».
Cuando se le preguntó qué haría Rusia para evitar tales intrusiones en el futuro, Ryabkov dijo a los periodistas que sus fuerzas estarán listas para disparar contra objetivos si las advertencias no funcionan.
«Podemos apelar a la razón y exigir que se respete el derecho internacional», dijo Ryabkov, citado por la agencia de noticias Interfax. «Si eso no ayuda, podemos lanzar bombas y no sólo en su rumbo, sino justo en el objetivo, si esos colegas no lo entienden de otra manera».
Gran Bretaña insistió en que el barco estaba realizando un viaje de rutina en una ruta reconocida internacionalmente y que siempre permaneció en aguas ucranianas. Reino Unido, como la mayoría de la comunidad internacional, reconoce a Crimea como parte de Ucrania a pesar de Rusia se anexó esa península en 2014.
El primer ministro británico, Boris Johnson, no quiso decir el jueves si había aprobó personalmente el viaje del Defender, pero insinuó que la Armada británica estaba defendiendo un punto al tomar esa ruta.
«Lo importante es que no reconocemos la anexión rusa de Crimea. Es parte de un territorio soberano de Ucrania», dijo Johnson a los periodistas el jueves durante una visita a un cuartel del ejército en Inglaterra. «Fue totalmente correcto que reivindicáramos la ley y que busquemos la libertad de navegación de la forma en que lo hicimos: tomar la ruta más corta entre dos puntos, eso es lo que hicimos».
Negó que las relaciones entre Reino Unido y Rusia estén en un mínimo histórico, y recalcó: «puedo recordar momentos en mi propia vida cuando las cosas han sido mucho peores».
La embajadora británica Deborah Bronnert visitó hoy el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, luego de ser convocada para que el gobierno ruso le presentara una protesta formal.