Los elefantes de una manada errante recorrieron carreteras pavimentadas y metieron sus trompas por las ventanas mientras se acercaban a una ciudad del suroeste de China, y las autoridades se apresuraban a proteger tanto a los animales como a la población.
El motivo por el que los 15 elefantes realizan el largo recorrido, que ha sido documentado y monitoreado por tierra y aire con una docena de drones, no estuvo claro. Las autoridades han pedido a los residentes de las zonas por las que han pasado que se queden en casa y están bloqueando carreteras con material de construcción mientras buscan atraer a los animales con comida.
La manada ha recorrido ya 500 kilómetros (300 millas) desde una reserva natural en las montañas del suroeste de la provincia. En las imágenes que los muestran deambulando por las noches por campos de cultivos, aldeas y calles pavimentadas de zonas urbanas parecen sanas.
Una ciudad de su ruta, Yuxi, desplegó cientos de camiones a lo largo de una carretera para disuadirlos de acercarse, reportó Beijing News. Los conductores comieron y durmieron dentro de sus vehículos durante días, incluso cuando escucharon cómo se movían al caer la noche, explicó el diario en un video publicado en internet.
El martes se acercaron a un hogar de ancianos y curiosearon metiendo sus trompas dentro de algunas de las habitaciones, lo que hizo que uno de los residentes se escondiese debajo de la cama, señalaron sus compañeros en una entrevista del canal online Jimu News.
Los elefantes alcanzaron el miércoles en la noche el distrito de Jinning, en el límite de la ciudad de Kunming, la capital de la provincia de Yunnan y donde viven siete millones de personas, reportó el jueves la agencia noticiosa oficial china, Xinhua.
El gobierno del distrito emitió un aviso en el que insta a los residentes a no dejar maíz u otros alimentos que puedan atraerlos en sus patios y a evitar el contacto.
Estaba «prohibido rodear y mirar boquiabiertos a los elefantes» o molestarlos con petardos u otros artilugios, añadió el aviso.
El grupo estaba compuesto originalmente por 16 animales pero, según el gobierno, dos regresaron a la reserva y una cría nació durante el trayecto. La manada está formada por seis hembras y tres machos adultos, tres jóvenes y tres crías, de acuerdo con los datos oficiales.
No se han reportado heridos, pero algunas informaciones apuntaron que los elefantes han causado daños o destrozos en cultivos por valor de más de un millón de dólares.
Por el momento no está claro cómo y cuándo regresarán a la reserva.
Los elefantes son los animales terrestres más grandes de Asia y pueden pesar hasta cinco toneladas.