PUERTO PRÍNCIPE, Haití / AP
El gobierno de Haití impuso el lunes un toque de queda nocturno y otras restricciones como parte de una “emergencia sanitaria” de ocho días para frenar la propagación del coronavirus.
Todas las actividades al aire libre quedarán prohibidas entre las 10 de la noche y las 5 de la mañana, de acuerdo con el decreto emitido por el presidente Jovenel Moise, quien el lunes se encontraba en Ecuador para asistir a la ceremonia de investidura del nuevo mandatario.
El decreto también hace obligatorio el uso de mascarillas en todos los espacios públicos, mientras que se exigirán revisiones de temperatura y estaciones de lavado de manos en todos los edificios públicos y privados como bancos, escuelas, hospitales y mercados. El distanciamiento social en espacios públicos debe ser de 1,5 metros (5 pies).
El presidente también ordenó a las instituciones públicas reducir su personal en servicio en un 50%, y alentó a que otros empleados trabajen desde casa.
Los residentes de Puerto Príncipe parecieron darle poca importancia a lo que se espera de ellos según los nuevos lineamientos, ya que seguían registrándose grandes multitudes en mercados callejeros y el transporte público. La mayoría de las personas no llevaba mascarilla ni mantenía el distanciamiento social.
De acuerdo con las estadísticas oficiales del gobierno, Haití ha reportado 13.906 casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia y 288 muertes relacionadas con el COVID-19. Pero un repunte reciente de infecciones diarias ha orillado a las autoridades a declarar el estado de emergencia.
Haití no ha empezado a vacunar a su población contra el COVID-19. El gobierno anunció recientemente que espera iniciar su campaña de vacunación en junio.