
El papa Francisco celebró hoy una ceremonia abreviada de la vigilia de Pascua luego de mostrar un acercamiento a los musulmanes y a las mujeres durante la Semana Santa, en la que empezó a dejar su sello en la Iglesia católica. El nuevo pontífice ingresó a la Basílica de San Pedro en penumbras y en silencio para oficiar la ceremonia del Sábado Santo, que evoca el lapso entre la crucifixión de Cristo en el Viernes Santo y su resurrección en el Domingo de Pascua.