Diseño La Hora / Alejandro Ramírez
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La Corte de Constitucionalidad (CC) otorgó un Amparo solicitado dizque para proteger a la niñez con motivo del desfile programado para celebrar la llamada diversidad sexual, no obstante que el escrito de solicitud del Amparo era una auténtica “guizachada” que solo por ello debió ser rechazado por la CC. Sin embargo, siguiendo con la tónica impuesta por Alejandro Giammattei y Miguel Martínez, pareja que dispuso declarar a Guatemala como Capital Provida de Iberoamérica tras la iniciativa del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia, los magistrados electos en un proceso que descaradamente dirigieron esas dos personas, ahora dicen salir en defensa de los niños que pueden verse influenciados por el referido desfile.

Decimos que se predica con el ejemplo porque tanto esa Corte como buena parte de la sociedad se hicieron los sordos, ciegos y mudos ante el pernicioso ejemplo que desde la más alta posición política del país daban Giammattei y Martínez, pareja sentimental producto, obviamente, de esa diversidad sexual que ahora la CC considera como una amenaza para la niñez. Respetamos las decisiones de cada quien, pero durante 4 años los niños tuvieron el ejemplo que dio una relación cínicamente descarada y no puede, de ninguna manera, considerarse que de un desfile hay que proteger a los niños, mientras las mentes de la juventud vieron cómo Giammattei puso a los pies de Miguelito todo el país de una manera ilegal porque estaba perdidamente enamorado.Y conformaron CC, como aseguraron Ministerio Público (MP), Contraloría de Cuentas y magistrados con la intención de garantizar la impunidad a quienes además de compartir amoríos se bañaron literalmente con el dinero de los guatemaltecos en la más obvia y burda corrupción que registra nuestra historia.

No fue hasta que le pidieron a la CC que les diera luz verde para “robarse las elecciones” que empezó el distanciamiento que tuvo otro punto álgido con el rechazo al Presupuesto 2025 y ahí algunos se dieron cuenta que los criminales son rencorosos.

Creemos que nuestra niñez tiene merece una formación ejemplar en la que se privilegien los valores más importantes, pero entre el ejemplo que surgía de la presidencia y las negociaciones con un sindicato que prostituyó la labor de los maestros y educadores, que terminaron convertidos en grupo de choque para defender a los operadores de la corrupción, es absurdo que ahora venga la CC, que apañó ambas actitudes perjudiciales para la niñez, a darse baños de pureza cuando se saben los lazos que algunos en la corte todavía mantienen con la pareja que nos gobernó.

La enseñanza y formación de la niñez debe ser una prédica con el ejemplo que den los adultos, situación que tristemente ha sido terrible en Guatemala.

Redacción La Hora

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