Siempre recordamos las palabras que pronunció John F. Kennedy al ser juramentado como Presidente de Estados Unidos, diciendo a los ciudadanos “No pienses qué puede hacer tu país por ti. Piensa qué puedes hacer tú por tú país” porque pensamos que es un llamado a la responsabilidad de todos y cada uno de los habitantes de cualquiera de los países de la Tierra. Y hoy viene a cuento porque mañana un gremio en particular, el de los abogados, tiene la inmensa oportunidad de hacer un serio aporte para rescatar y recuperar el Estado de Derecho destruido por el control que las mafias ejercen sobre todas las instituciones relacionadas con la justicia.
Los ciudadanos tuvimos el año pasado la oportunidad de expresar un mandato en contra de la corrupción y en favor del cambio en las elecciones generales que terminó siendo claro y contundente para eliminar la corrupción y todo lo que la acompaña, incluyendo desde luego la ausencia de una justicia objetiva para procesar los casos de enriquecimiento ilícito. Desafortunadamente ese mandato quedó en una aspiración porque, tal y como se había planificado, el entramado de la justicia se puso a funcionar para debilitar al nuevo gobierno, tarea que se ha visto facilitada por la falta de determinación y estrategia de las autoridades surgidas de ese mandato.
Pero mañana el gremio de los abogados tendrá la oportunidad de enviar a las Comisiones de Postulación a sus representantes y todos los abogados decentes tendrán la oportunidad de imponerse a las mafias, que derrochan dinero en propaganda que busca la compra de votos, para ser factor decisivo en la conformación de las nuevas Cortes, tanto las de Apelaciones como la Suprema de Justicia que deberán ser conformadas este año de conformidad con el mandato constitucional.
Algunos dudan de si puede lograrse una mayoría de votos en el Colegio de Abogados buscando la decencia, transparencia y legalidad pero, sin duda, ello es posible porque contra una generalizada creencia popular, derivada de que los que más suenan y sobresalen son los que se han aliado para destruir la justicia, en realidad son muchos los juristas que realmente valoran la ética y, sobre todo, la importancia del Estado de Derecho.
Hemos visto cómo, en las Cortes y desde la Universidad de San Carlos, así como algunas de las universidades creadas específicamente para jugar un papel decisivo en las postuladoras, se trabaja para preservar el modelo de control perverso existente, pero también vimos ya entre los Rectores un aire con remolino que impidió al de la USAC presidir, como pretendía, alguna de las Comisiones.
Mañana el gremio tiene la oportunidad de reivindicarse y ningún abogado debe quedarse sin acudir a emitir el sufragio porque se trata, sin duda, de la más importante decisión a nivel nacional que pueden tomar como gremio. Y los ojos públicos deberán estar centrados en esa crucial votación.