Bagdad, Irak
AFP
Una operación militar iraquí en curso contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en el norte de Irak podría originar el desplazamiento de 30 mil civiles en las próximas semanas, advirtió hoy la agencia de las Naciones unidas para los refugiados.
Las fuerzas federales iraquíes y kurdas, apoyadas por la coalición internacional dirigida por Estados Unidos, lanzaron en marzo una ofensiva contra el EI en la provincia de Nínive, donde la capital Mosul es el bastión de los yihadistas en Irak.
Esas fuerzas se encuentran a menos de 50 km al sur de la segunda ciudad del país, pero los combates en curso obligan a miles de civiles a huir de sus casas.
«Con la continuación de la ofensiva militar, 30.000 nuevos desplazados» podrían llegar a la región de Majmur «en las próximas semanas», indicó el Alto comisionado para los refugiados (ACNUR) en referencia a una ciudad en el sur de Mosul que sirve como principal base de la operación militar.
Unas 8.000 personas se refugiaron en un campamento en Debaga, al este de Majmur, agregó ACNUR en un comunicado.
Y un nuevo campamento tuvo que ser abierto en el estadio de futbol de Debaga «para responder a la llegada de un número creciente de familias desplazadas», agregó
«La nueva instalación hará posible reducir la sobrepoblación (de otros campamentos) a la que asistimos desde el inicio de los combates», afirmó Fred Cussigh, responsable de ACNUR en la zona.
Las organizaciones internacionales temen que una operación militar de envergadura para retomar Mosul a los yihadistas provoque un desplazamiento masivo de la población que Irak no puede administrar.
Según cálculos, cerca de un millón de civiles viven todavía en Mosul, que está en manos del EI desde su ofensiva fulgurante en Irak en junio de 2014.
Más de 3,4 millones de personas fueron desplazadas en el país desde el inicio de 2014.
